Tradición y salud: una se contrapone a la otra cuando se habla de la cultura hindú, donde  el Ganges, su río sagrado, recibe cada verano a cientos de niños que aprenden a nadar en sus aguas contaminadas y a miles de personas qe se bañan a toda hora del día.

Lo cierto es que está comprobado que este río es uno de los más contaminados de todo el mundo. Cualquier cosa que se sumerja en esas aguas está expuesto a una coctel de contaminantes como aguas negras, residuos industriales y restos de cuerpos parcialmente cremados en los funerales que se celebran a orillas del río.

En la religión hindú, el río Ganges es una diosa cuyas aguas sirven para purificar. Pero la ciencia sugiere lo contrario.

El estatus de río sagrado hace que la sociedad hindú ignore los problemas sanitarios que existen en la zona. Para las madres que observan a sus hijos en el agua, es una bendición que los pequeños puedan sumergirse y disfrutar en él.

“Somos el pueblo de una ciudad sagrada. Nada nos pasa cuando nos metemos al agua”, comenta Namita Tiwari, madre de uno de los nadadores de 13 años.

“El agua es única”, señala Pramod Sahni. “Una vez que la tomas, quieres volverlo a hacer”. Incluso él bebe un poco durante las clases.

Cada día se vierte a lo largo de este río unos 300 millones de litros de aguas residuales sin tratar. En Varanasi, una ciudad de un millón de personas, 35 desagües y alcantarillas terminan en sus aguas. Dos de ellas a unos pocos kilómetros de donde suceden las clases de natación.

La Fundación Sankat Mochan (SMF, por sus siglas en inglés), se ha dedicado a hacer activismo para que limpien el río debido a que se han descubierto altos niveles de bacteria coliforme fecal 35 veces por encima del máximo permitido por las autoridades ambientales del país, y más de 440 veces por encima del nivel máximo recomendado para nadar en cualquier otra parte del mundo.

Otro de los datos importantes por los que el río está tan contaminado son las ofrendas. Según la fe hindú, cualquiera que sea cremado en Varanasi queda libre de Moksha, el ciclo de la vida y la muerte, por lo tanto, alguna parte del cuerpo incinerado se deposita en el río como una ofrenda.

Al año se creman aproximadamente 32.000 cuerpos en Manikarnina y HarishChandra, en Varanasi, esta última está aguas arriba de las clases de los clubes de natacion.

Los cuerpos de los pobres y los sin techo, que por razones financieras no se pueden cremar, se echan al río directamente.

Todo esto aumenta el riesgo de contraer enfermedades transmitidas por el agua.

Por otra parte, los efluentes industriales del creciente número de fábricas que hay en la ciudad, incluyen metales pesados dañinos como cadmio y cromo.

La zona más contaminada del Ganges son sus orillas. Un miembro de la Autoridad Nacional de la Base del Río Ganga, BD Tripathi, explica que ya no se puede “lavar” la contaminación.

Tampoco ayuda que el lugar más seguro para nadar, a unos 15 m de la orilla del río, y lejos de las peligrosas corrientes de aguas más profundas, sea el más contaminado del río.

Con información de BBCMundo.