Las personas con Síndrome de Down son más susceptibles a infectarse de coronavirus y desarrollar una enfermedad grave, afirma un estudio del Centro de Regulación Genómica (CRG) de la Generalidad de Cataluña, en España.
Los resultados de la investigación, publicados en la revista 'Scientific Reports', refuerzan las conclusiones de trabajos independientes previos que revelavan un riesgo de mortalidad 10 veces mayor en personas con síndrome de Down enfermas de Covid-19.
De acuerdo con los autores, el estudio aporta más pruebas que apoyan las demandas para vacunar prioritariamente a las personas con dicho padecimiento, por ser más vulnerables.
Personas con Síndrome de Down tienen alteraciones genéticas que favorecen la infección de Covid-19
Al analizar los datos transcriptómicos disponibles del Síndrome de Down, los investigadores del CRG descubrieron alteraciones que pudieran estar relacionadas con la infección por SARS-CoV-2 y la progresión de la enfermedad del Covid-19.
Por ejemplo, encontraron que TMPRSS2, un gen que codifica una enzima fundamental para impulsar la entrada del nuevo coronavirus en las células humanas, tenía niveles de expresión 60 por ciento más altos en personas con Síndrome de Down, ya que dicho gen está ubicado en el cromosoma 21, del cual las personas con Down tienen tres copias.
También descubrieron niveles más altos de expresión para el gen CXCL10, que favorece una inflamación descontrolada, provocando que el sistema inmunológico ataque a sus propias células pulmonares, reacción conocida como tormenta de citoquinas, que es una de las principales causas de hospitalización y mortalidad por Covid-19.
Personas con Síndrome de Down tendrían más riesgo de padecer fibrosis pulmonar
Ante sus hallazgos, los autores plantean que las personas con Síndrome de Down podrían ser más susceptibles a complicaciones a largo plazo, como la fibrosis pulmonar.
El estudio concluye también que las personas con síndrome de Down serían susceptibles a infecciones bacterianas después de haber pasado por la enfermedad, pues se encontró que las células trisómicas expresan bajos niveles de NLRP3, un gen fundamental para mantener la homeostasis contra las infecciones patógenas.
Una buena noticia es que la investigación también encontró señales que evidencia de que las personas con Down tienen una respuesta al interferón extremadamente activa, una defensa innata de primera línea que detiene la replicación viral dentro de las células.
Dos de los genes relacionados con la respuesta al interferón, IFNAR1 e IFNAR2, se encuentran también en el cromosoma 21.
Con información de EFE