A más de un año del inicio de la pandemia, los científicos parecen haber encontrado el mejor cubrebocas para bloquear la transmisión del coronavirus.
Se trata de los cubrebocas con nanofibras, que son capaces de evitar la transmisión de aerosoles prácticamente un 100 por ciento.
Así lo afirma un estudio realizado por científicos de Estados Unidos y publicado recientemente en la revista académica Environmental Science & Technology Letters.
Electrohilado, la clave para fabricar cubrebocas más eficientes ante el coronavirus
La investigación fue realizada por expertos de la Universidad de California en Riverside, en colaboración con la Universidad George Washington.
Los científicos fabricaron sus propios cubrebocas con filtros de nanohebras de polímero que tenían unos 300 nanómetros de diámetro
Esto fue posible gracias a una novedosa técnica denominada electrohilado que consideran, puede hacer avanzar el diseño y la fabricación de mascarillas faciales y filtros de aire.
“Debido a las nanofibras ultrafinas (~ 300 nm), los filtros de aire electrohilados tenían un tamaño de poro mucho más pequeño en comparación con la mascarilla quirúrgica y las máscaras de tela (un par de micrómetros frente a decenas a cientos de micrómetros)”
Autores del estudio
La investigadora Yun Shen, coautora del estudio, destacó que la técnica del electrohilado permite fabricar cubrebocas más eficientes y baratos.
“El desarrollo de nuevas máscaras y filtros de aire mediante electrohilado es prometedor debido a su alto rendimiento en filtración, viabilidad económica y escalabilidad, y puede satisfacer las necesidades in situ de las máscaras y filtros de aire”.
Cubrebocas con nanofibras pudieron bloquear al coronavirus hasta un 99.9 por ciento
La capacidad protectora de los cubrebocas con nanofibras fueron sometida a un estudio comparativo con mascarillas quirúrgicas, de algodón y las polainas para cuello.
Los resultados determinaron que los cubrebocas hechos con filtros de nanohebras de polímero pueden bloquear hasta el 99.9 por ciento de los aerosoles de coronavirus.
En tanto, las mascarillas de algodón y las polainas del cuello sólo pudieron bloquear entre el 45 y el 73 por ciento de los aerosoles.
Finalmente, el cubrebocas quirúrgico logro impedir la transmisión del coronavirus cerca del 98 por ciento.