Testimonios, archivos, musicales y demás, forman parte de este documental llamado ?What ?happened, Miss Simone?" dirigido por Liz Garbus, una realizadora que ha dedicado sus trabajos a personajes como el ajedrecista Bobby Fisher o la estrella Marilyn Monroe.
Este documental nos narra la vida de Nina Simone, una mujer que luchó por la libertad de su arte, su música y su identidad como afroamericana. Presentado en el pasado Festival de Sundance donde fue acogido calurosamente, What happened, Miss Simone? ha sido producido en colaboración con Netflix. El documental toma el título de un artículo escrito por la poeta y activista de los derechos civiles Maya Angelou, publicado en la revista Redbook en la década de los setenta, en el que se interrogaba por la artista después que esta se hubiera "exiliado? de los Estados Unidos. Un trabajo de investigación que viene a sumarse a los documentales que en los últimos años han intentado atrapar la leyenda de una intérprete cuya carrera musical estuvo marcada por su condición de mujer negra.
Simone, cuyo nombre real era Eunice Waymon, fue una pianista virtuosa e intérprete asombrosa, que realizó junto a su marido y mánager, Andrew Stroud (un antiguo policía de Broonklyn con el que vivió una tomentosa relación de amor-odio), una carrera señalada en un primer momento por las reglas del show bussines tradicional que más tarde se transformaría en una búsqueda, nunca concluida, de su propia construcción como mujer y artista en libertad.
Esta cantante, artista, diva, recorrió todos los estilos musicales: clásico, góspel, jazz, rhythm and blues, pop, folk o protest song y siempre se mostró orgullosa de su negritud. El documental aborda sus orígenes humildes en un pueblo de Carolina del Norte, sus primeros éxitos en los escenarios de Nueva York a finales de los años cincuenta, su debut en el Festival de Jazz de Newport, su consagración como diva, su conversión en artista comprometida y el exilio en Europa. En el podemos ver testimonios como el de su hija Lisa o su director musical, Al Schakman.
Fue la primera mujer de raza negra en subir al escenario del Carnegie Hall para interpretar música clásica, carrera y vocación truncada gracias a las barreras raciales que Simone enfrentó cada día de su vida.
Desaparecida la cantante de jazz Billie Holiday, Nina Simone aparece como la nueva sacerdotisa del jazz ?una denominación como género musical que la cantante siempre rechazará por tratarse de una invención de los críticos blancos? destinada a ocupar el trono vacante. Simone consigue su primer gran reconocimiento interpretando un clásico como I Love You, Porgy de la comedia musical Porgy and Bess. Consigue hacerse un hueco en el panorama pop gracias a canciones como Do not Le Me Be Misunderstood que el grupo The Animals convierte en un éxito juvenil o la turbadora I Put A Spell On You incluida en la banda sonora de 50 sombras de Grey versionada por Annie Lennox.
Sus versiones de temas como Ne me quitte pas o My way pasan a la historia más emotiva del cancionero del siglo XX. Son los años en los que la cantante afirma su compromiso con los derechos civiles y su lucha contra la discriminación racial. En los años 60, Simone entró al grupo de artistas que participan en la famosa marcha de Selma (1965), promovida por Martin Luther King contra la discriminación racial.
Después del asesinato de líder negro en 1968, Simone se unió a movimientos radicales contra la discriminación, compromiso que perjudicó su carrera, provocando que la cantante abandonara los Estados Unidos, Liberia, Suiza, Inglaterra y finalmente terminar en Francia, su país de adopción.
A principios de los años 90 se le diagnostica trastorno bipolar y su nombre aparece en las páginas de sucesos cuando dispara a dos jóvenes a los que acusa de molestarla mientras descansaba en su jardín. La cantante murió en el año 2003 a la edad de 70 años a causa de cáncer.