Para cualquier tipo de establecimiento, se vuelve necesario contar con un reglamento que ayude a guiar a los integrantes sobre lo que está permitido y lo que no. En una escuela, es aún más indispensable contar con un código de conducta que sea comprensible y justo para todos los alumnos y directivos.
Antes de esforzarnos por acatar cada orden descrita, es importante saber qué es y cómo funciona un reglamento escolar. A continuación, te lo explicamos.
¿Qué es un reglamento escolar?
El reglamento escolar es un listado de normas, reglas, y prohibiciones destinadas a mantener el orden de la institución educativa. En él, no solo se describirán las obligaciones del alumno, maestro, personal, o directivo, también deberán especificarse los derechos que cada integrante posee.
Al igual que cualquier tipo de reglamento, el escolar tiene como objetivo principal fomentar la paz y sana convivencia dentro de las instalaciones. Contar con un reglamento escolar, ayuda a que, desde niños, los alumnos aprendan a relacionarse con su entorno bajo ciertas reglas y valores.
Características del reglamento escolar
Generalmente, todos los reglamentos escolares se rigen con las siguientes características:
- No debe afectar la integridad de ningún individuo.
- Debe ser justo para cada integrante.
- Tienen códigos normativos escritos, completos, y explícitos, que se relacionan con la conducta permitida dentro de la escuela.
- Son específicos de la institución, ya que cada escuela puede necesitar reglas distintas.
- Están articulados, es decir, están redactados en distintas secciones y subtítulos.
- Son escritos por el directivo de la institución, y están dirigidos a todo integrante de la escuela, ya sea permanente o visitante.
- En caso de la violación de alguna regla, la autoridad determinará la sanción correspondiente. Estas, también deben ser notificadas con anterioridad.
Ejemplos de algunos puntos expuestos en un reglamento escolar
A pesar de que un reglamento escolar puede personalizarse, existen reglas generales que deben incluirse en ellos, por ejemplo:
- Derecho a que todos sean escuchados, orientados, y tratados con respeto y de manera justa.
- Derecho a acceder a todos los servicios de la escuela como biblioteca, comedor, o baños.
- Respetar y hacer buen uso de las instalaciones
- Obedecer a la autoridad
- Justificar con anticipación la inasistencia a clases.
- Portar correctamente el uniforme.
Seguir al pie de la letra las normas descritas en un reglamento escolar, no solo hará que los maestros y directivos tengan mayor control: también ayudarán a que el alumno aprenda a desenvolverse responsablemente dentro y fuera del salón de clases.