Investigadores del Centro de Ciencias de la Salud de la Universidad Estatal de Luisiana descubrieron un compuesto llamado elovanoides, capaces de bloquear el coronavirus y proteger las células pulmonares.
Este hallazgo fue publicado en el sitio ‘Scientific Reports’ y explica que los elovanoides son capaces de bloquear la entrada del SARS-CoV-2 a las células pulmonares.
Los científicos utilizaron elovanoides en un tejido pulmonar infectado
Además, los elovanoides protegen los alvéolos del pulmón, la retina y previenen el daño cerebral gracias a sus compuestos.
Los elovanoides son: “mensajeros químicos bioactivos hechos de ácidos grasos poliinsaturados de cadena larga omega-3 descubiertos por el laboratorio de Bazán en 2017”.
Para realizar este descubrimiento, el equipo de investigación probó elovanoides en tejido pulmonar infectado de un hombre de 78 años en cultivos en placa de Petri.
Luego de diversas pruebas, descubrieron que reducían la capacidad de la proteína pico del SARS-CoV-2 para unirse a los receptores y entrar en las células.
El compuesto también desencadena la producción de proteínas protectoras y anti-inflamatorias que contrarrestan el daño pulmonar.
Nicolas Bazan, autor principal del estudio, asegura que este descubrimiento es importante en la lucha contra el coronavirus debido a que afecta la mucosa nasal, el tracto gastrointestinal, el ojo y el sistema nervioso.
Los resultados de la investigación proporcionan una base para medir el riesgo de enfermedad.
“Estos riesgos incluyen la progresión y la protección del pulmón contra el coronavirus y otras patologías, incluidas algunos tipos de neumonía”
Nicolas Bazan
Desde su descubrimiento, se han encontrado diversos usos para los elovanoides
En 2019, el Centro de Ciencias de la Salud de la Universidad Estatal de Louisiana, descubrió que los elovanoides protegían contra enfermedades degenerativas como el Alzheimer.
Los elovanoides fueron descubiertos por el propio Nicolas Bazan e investigadores del Centro de Ciencias de la Salud de la Universidad Estatal de Luisiana.
“Creemos que este descubrimiento representa un nuevo concepto de biología que será transformador en la medicina”, escribió Nicolas en un estudio publicado por la revista Nature en 2017.