Gabriel García Márquez, el hombre que escribió para que sus amigos lo quisieran más, inmortalizó un poema cuando se dio cuenta de que en realidad, lo más importante que hizo en la vida no fueron sus libros, sus hijos: Cuando los padres nos quedamos huérfanos.

Lo cierto es que “Cuando los padres nos quedamos huérfanos” es un poema que se le atribuye a Gabriel García Márquez, aunque no hay certeza de que el colombiano lo haya escrito.

Gabriel García Márquez

¿A quién le habría dedicado Gabriel García Márquez su poema “Cuando los padres nos quedamos huérfanos”?

Cuando los padres nos quedamos huérfanos” es un poema atribuido a Gabriel García Márquez que habla de cuando los hijos se convierten en adultos y deben partir del seno familiar.

En este sentido, el escritor anima a aprovechar cada momento con los hijos, pues las infancias son limitadas y un día, estos forjarán su carácter dejando en sus padres una sensación de nostalgia por lo que fue. ¿Debió escribir menos y pasar más tiempo con ellos?

Gabriel García Márquez

Sobre la relación de Gabriel García Márquez con sus hijos, Rodrigo García Barcha cuenta en entrevista algunas anécdotas que explicarían partes de “Cuando los padres nos quedamos huérfanos”:

  • Deberíamos haber ido más junto a su cama, al anochecer, para oír su alma respirando conversaciones y confidencias entre las sábanas de la infancia...

Rodrigo García Barcha recuerda que cuando entraba al cuarto de Gabriel García Márquez y su padre se encontraba trabajando, ni siquiera se inmutaba.

“Daba igual porque él no oía ni veía. Tenía una disciplina muy férrea y un poder de concentración increíble”

Rodrigo García Barcha, cineasta e hijo de Gabriel García Márquez.
Gabriel García Márquez
  • Al principio fueron al campo, la playa, navidades, pascuas, piscinas y amigos. Sí, había peleas en el auto por la ventana, los pedidos de la música de moda...

El hijo cineasta de Gabriel García Márquez cuenta que su papá abortó un viaje en el verano de 1965 en plena carretera, cuando él y su hermano se encontraban sentados en el asiento trasero del carro, para regresar a casa y teclear con desesperación su obra maestra, “Cien años de soledad”.

  • Y nos llegó el momento en que sólo miramos de lejos, oramos mucho (en ese momento se nos había olvidado) para que escojan bien en la búsqueda de la felicidad y conquisten el mundo del modo menos complejo posible...

Rodrigo García Barcha cuenta que no le servían mucho las opiniones de Gabriel García Márquez sobre su trabajo porque siempre lo apoyaba y le decía que todo era precioso.

“Gabo organizaba funciones de mis películas y se las enseñaba a sus amigos. Me aplaudía mucho; decía ‘¡me encanta, es precioso!”

Rodrigo García Barcha, cineasta e hijo de Gabriel García Márquez.