En Islandia, el último restaurante de comida rápida McDonald's cerró hace 10 años, luego de la crisis financiera que afectó al país, en octubre de 2009. El último día que abrieron, Hjörtur Smarason compró la que asegura, fue la última hamburguesa servida en ese país.

En alguna parte escuchó que los productos de la cadena estadounidense nunca se echan a perder, así que decidió comprobar si la leyenda era cierta y colocó el pedido en una bolsa de plástico sellada, que permaneció intacta durante tres años en su garage.

La última hamburguesa de Islandia.

“Decidí comprar una última comida por su valor histórico, ya que McDonald’s cerraba. Escuché que la comida de McDonald’s nunca se descompuso, así que quería ver si era verdad o no”.

Hjörtur Smarason, comprador de la última hamburguesa de Islandia.

Al ver que pasaba el tiempo y la comida parecía no haber sufrido ningún tipo de descomposición, decidió donarla al Museo Nacional de Islandia, pero como este no contaba con los medios para conservarla, se lo cedió al Reykjavík Bus Hostel.

No obstante, la estancia del menú en ese lugar también fue temporal, pues al poco tiempo fue trasladado a Snotra House, una casa de huéspedes ubicada en Thykkvibaer, al sur del país, donde se exhibe dentro de una vitrina, como si se tratara de una obra de arte, y ha permanecido sin algún rastro de putrefacción durante los últimos años.

La última hamburguesa de Islandia.

Sigurdur Gylfason, dueño del lugar, afirma que desde la llegada del pedido de McDonald’s su establecimiento ha sido visitado por gente de todo el mundo, solo para ver la última hamburguesa de Islandia.

Debido a ello, decidió colocar una cámara web que transmite en vivo por streaming lo que sucede con la comida las 24 horas del día. El hotel afirma que recibe hasta 400 mil visitas al día.

"Es algo divertido verlo, pero te hace pensar en lo que estás comiendo. No hay moho ni signos de deterioro, solo el envoltorio parece viejo".

Sigurdur Gylfason, dueño del lugar.

Este y otros experimentos similares con la comida de McDonald’s han hecho pronunciarse a la cadena de restaurantes, afirmando que “en un ambiente correcto” sus hamburguesas sí llegan descomponerse.

“Para que se produzca la descomposición, necesitas ciertas condiciones, específicamente humedad. Sin suficiente humedad, ya sea en los alimentos o en el medio ambiente, es posible que las bacterias y el moho no crezcan y, por tanto, la descomposición es poco probable”.

McDonalds.

Con información de En Punto, AFP y BBC.