Debido a la destrucción de su hábitat provocado por la agricultura y la tala de árboles, los loros se encuentran cada vez más cerca de la extinción a nivel mundial, así lo asegura un estudio realizado por instituciones de Argentina y Australia.
Los loros, pericos, cotorros y cacatúas pertenecen a una familia de aves conocida como psitaciformes que se caracterizan por su plumaje vistoso, lengua gruesa, cabeza grande, así como pico fuerte, corto y encorvado.
Los psitaciformes son uno de los grupos de aves más ricos del mundo porque comprende 398 especies, incluidos los loros. Sin embargo, casi un tercio (112 especies) está en peligro de extinción, según la Lista Roja de Especies Amenazadas de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN).
Entre las especies que se encuentran en la categoría de ‘En peligro crítico de extinción’ (la más grave para organismos amenazados), más de la mitad vive en Australia y el Pacífico, donde sus principales riesgos son el tráfico de especies y la destrucción de sus hábitats.
Áreas protegidas para loros serían ineficientes
En Australia, los bosques templados fueron altamente degradados a principios desde el año 2000, una tendencia que continuará en los próximos 30 años, advierte la investigación publicada en la revista científica ‘Global Change Biology’.
"Predecimos que la expansión de la agricultura tendrá un efecto aún más negativo en el estado de conservación de los loros, empujando a muchas de sus especies al borde de la extinción en el futuro cercano"
Javier Nori, investigador y coautor del estudio
Javier Nori, investigador del Instituto de Diversidad y Ecología Animal (IDEA) de Argentina. también señaló que los grupos más amenazados de estas aves son los menos representados en áreas protegidas de todo el mundo.
"Esto es una prueba adicional de la ineficiencia de las áreas protegidas en salvaguardar la biodiversidad global de aves"
Javier Nori