¿Los gatos negros dan mala suerte? Por siglos, los michis de color oscuro han cargado con una terrible reputación vinculada con mitos y leyendas que los pintan de manera negativa.
Un ejemplo de ello es la creencia de que cuando un gato negro se cruza frente a alguna persona, esta última vivirá una racha de mala suerte.
Estas interpretaciones negativas sobre los gatos negros se remontan a muchos siglos atrás, primero, debido a un decreto del papa Gregorio IX y luego, cuando fueron vinculados con las brujas.
Papa Gregorio IX convirtió a los gatos negros en símbolo demoniaco
En el año 1233, el papa Gregorio IX emitió un decreto conocido como Vox In Rama, que puso en riesgo la existencia de los gatos negros en Europa.
Se dice que esto se derivó de un sueño que tuvo Gregorio IX, durante el cual se le apareció un gato negro en el que habitaba la figura del diablo y que, mirándolo fijamente, le ordenó que se postrara ante él.
En el documento, Gregorio X describe un rito de iniciación satánica -que habría visto en un sueño- en el que estaría involucrada la estatua de un gato negro con la cola erguida, que cobraba vida, convirtiéndose en una encarnación del demonio.
Aunque el Papa no condenó directamente a los gatos negros en su decreto, tras hacerse público, este felino de color oscuro pasó a ser considerado un animal maligno y demoníaco, por lo que mucha gente estuvo dispuesta exterminarlo.
Gatos negros fueron víctimas de la caza de brujas en EU y Europa
A esta fama ya negativa se sumaron las supersticiones surgidas durante el siglo XVII, en los Estados Unidos y algunas zonas de Europa donde se creía que los gatos negros eran brujas que se habían reencarnado o que las ayudaban con sus malas acciones.
Esto significó que durante la época de la cacería de brujas, los gatos negros sufireran el mismo destino que sus dueñas, quemadas en la hoguera o masacradas de otras formas.
Lamentablemente, aunque han pasado muchos siglos, estas creencias prevalecen en muchos lugares del mundo, donde incluso se cree que el pelaje negro de los gatos es un signo de muerte y mala suerte, como sucede con los pájaros negros.
Ante ello, cabe destacar que en otras culturas, los gatos son considerados como símbolo de buena fortuna e incluso de protección, como sucedía en Egipto, donde al ser familiar del león, se le consideraba un representante del dios Ra.
