Nunca en toda la historia del calzado habían existido botas tan horrendas como las UGG, esos pequeños huevitos cafés que arruinan cualquier outfit.

Un motivo más para extinguirlas es el que nos acaba de dar Médica Sur en una publicación de Facebook, donde asegura que este tipo de zapatos no aportan ningún soporte a los pies e incluso pueden lastimarlos si estos son planos.

Pero lo peor es que aumenta las bacterias y hongos debido al calor y el sudor que generan en los pies, así que los médicos recomiendan evitar su compra y uso.