¿Por qué comemos 12 uvas en la celebración de Año Nuevo? Este ritual se realiza en muchas partes del mundo en punto de las 00:00 horas del 1 de enero.
De acuerdo con la tradición, comer 12 uvas durante el primer minuto del 1 de enero traerá buena fortuna durante todo el año.
Seguramente, el ritual de comer 12 uvas lo has llevado a cabo por varios años, pero ¿conoces su significado? ¿Sabes como se originó?
A continuación te contamos todo lo que sabemos sobre la tradición de comer 12 uvas en la celebración del Año Nuevo.
12 uvas de Año Nuevo: Significado del ritual
Una de las celebraciones más populares en el mundo es la llegada del Año Nuevo y con ello también surgen rituales y tradiciones para iniciar el nuevo ciclo.
En varios países es común festejar la llegada de Año Nuevo comiendo 12 uvas en punto de la media noche.
Se cree que este ritual traerá abundancia y buena suerte durante el año que está por iniciar.
Tradicionalmente se deben comer 12 uvas durante el primer minuto del 1 de enero; cada uva representa un deseo o propósito por mes.
Si logras comer las 12 uvas en un minuto se cumplirá todo lo que pediste, al menos así lo indica el ritual de Año Nuevo.
Se debe comer una uva por cada campanada de media noche, pero ten cuidado, si no las masticas bien puede ocurrir un accidente.
12 uvas de Año Nuevo: Historia y origen del ritual
Existen varios rituales para dar la bienvenida al Año Nuevo: usar calzones rojos o amarillos, salir a la calle con una maleta de viaje, comer lentejas, etcétera.
Sin embargo, comer 12 uvas para celebrar Año Nuevo es el ritual más popular en todo el mundo.
Aunque no se conoce exactamente el origen de esta tradición hay dos historias que pueden explicar el origen de las 12 uvas.
Se cree que fue en España, durante el año 1909, cuando surgió este ritual.
La historia cuenta que en 1909 los productores de uvas tenían un excedente de sus frutas.
Por ello, los mercantiles comenzaron a inventar que comer 12 uvas en la celebración de Año Nuevo traería mucha suerte.
Otra leyenda dice que la burguesía española copió la tradición de los alemanes y franceses.
Ellos acostumbraban a comer uvas y vino blanco en la celebración de Año Nuevo.
Los españoles remplazaron el vino blanco por vino espumoso y decidieron comer una uva por cada campanada que anuncia la llegada de Año Nuevo.