La cafeína es, definitivamente, la sustancia estimulante y psicoactiva más aceptada en el mundo entero, pues el está presente en el café, que sin duda es una de las bebidas más populares, además de en otras como el té, refrescos y bebidas energizantes. Sin embargo, no se trata de un elemento totalmente inofensivo, sobre todo si se usa en exceso.

Es verdad que la mayor parte de las personas consume cafeína en cantidades moderadas, pero recientemente se ha popularizado tomar suplementos cuya alta concentración de la sustancia los vuelve un riesgo mortal.

Al respecto, la FDA ha emitido advertencias acerca lo peligroso que puede ser llegar a tomar cafeína en polvo; según sus investigaciones, una sola cucharadita equivale a tomar 28 tazas de café al mismo tiempo, lo que podría derivar en una sobredosis con graves consecuencias para la salud.

Los suplementos de cafeína o la cafeína en polvo suelen ser usados para bajar de peso o aumentar la potencia en las rutinas de ejercicio, pero algunos países, entre ellos Estados Unidos, han comenzado a prohibir su comercialización luego de que se registraran muertes relacionadas con el consumo. 

¿Qué pasa si tengo una sobredosis de cafeína? 

Un estudio realizado en Reino Unido y dirigido por la doctora de cuidados críticos Rebecca Harsten del Hospital Queen Elizabeth en Londres, explica lo que le pasó al cuerpo una paciente de 26 años que termino en la sala de urgencias médicas tres horas después de que ingirió dos cucharaditas de cafeína en polvo (aproximadamente 20 gramos). 

Harsten y sus coautores afirman que esta cantidad es suficiente para matar a una persona.

es más que suficiente matar a una persona, por lo tanto, califican como “suertuda” a la mujer que logró sobrevivir.

Los síntomas de la mujer fueron:

  • Palpitaciones
  • Sudoración
  • Ansiedad
  • Dificultad para respirar

Una vez que el equipo médico comenzó a estudiar el caso, encontraron que la paciente tenía una frecuencia cardíaca anormalmente rápida y presión arterial baja, acompañada de hiperventilación y vómitos. Un electrocardiograma reveló que tenía una arritmia conocida como taquicardia ventricular polimórfica.

Por si lo anterior fuera poco, su cuerpo también presentóacidosis metabólica, alcalosis respiratoria (un desequilibrio de dióxido de carbono y oxígeno en la sangre) y un alto recuento de glóbulos blancos.