El invierno ya está en pleno y comienzan las primeras enfermedades estacionales; sin embargo, hay una que pocas veces se toma en cuenta, pero es muy real: la alergia al frío.
Aunque suene a broma, la realidad es que sí se puede ser alérgico al frío, y no en un sentido figurativo, sino en algo real que puede causar varios malestares en quien la padece.
De acuerdo con diversos estudios, la alergia al frío se puede dar en 1 de cada 100 mil personas; pero debido a los síntomas que presenta, pocas veces es identificada como tal.
Aún más, quien es alérgico al frío no sólo presenta afecciones cuando baja la temperatura, también al consumir alimentos congelados como helados.
Esto, de acuerdo al Instituto Nacional de la Salud de Estados Unidos.
¿Qué provoca la alergia al frío?
La alergia al frío es causada por las histaminas, compuesto que se encuentra dentro de nuestro cuerpo que se libera en el sistema inmune cuando se percibe un agente maligno.
Cuando una persona es alérgica al frío, las histaminas responden de manera explosiva, alterando todo el funcionamiento del cuerpo, principalmente el sistema nervioso e inmune.
Se puede decir que las histaminas “piensan” que el frío es un virus o germen al que hay que combatir; pero al no ser el caso, el cuerpo se ataca a sí mismo, provocando diversas reacciones.
¿Cuáles son los síntomas de la alergia al frío?
En general, los síntomas de la alergia al frío son los mismos que los de otras alergias, que van desde la aparición de ronchas y congestión nasal, hasta una posible anafilaxis.
No obstante, también pueden producir síntomas muy parecidos al resfriado común, como tos, voz ronca, estornudos, flujo nasal o cansancio.
De ahí que se piense que una persona tenga gripa y no una alergia al frío.
Los síntomas generales de la alergia al frío son los siguientes:
- Secreción nasal
- Cansancio
- Dolor de garganta
- Urticaria
- Erupciones cutáneas
- Hinchazón
- Dolor de cabeza
- Dificultad para respirar
Ahora bien, existe una manera de identificar si una persona es alérgica al frío o sólo está resfriada y esa tiene que ver con la fiebre.
Cuando se es alérgico al frío, la fiebre nunca es un síntoma; sin embargo, esta sí puede aparecer cuando se sufre de alguna enfermedad respiratoria.
Además se debe de tomar en cuenta el tiempo que persisten los síntomas, pues en el resfriado estos no duran más de 2 semanas.
Mientras que en la alergia al frío, persisten mientras se este expuesto.
¿Cómo se trata la alergia al frío?
Quienes sufren de alergia al frío, por lo general se les receta antihistamínicos para prevenir la reacciones severas, y epinefrina para la urticaria y problemas con los pulmones.
Además se les recomienda que no consuman alimentos y bebidas muy frías, además que eviten exponerse a climas congelantes.
Fuera de esto, no hay un tratamiento como tal para curar la alergia al frío; por lo que se recomienda a quienes la padecen que tomen su precauciones en temporada invernal.
Con información del Instituto Nacional de Salud de Estados Unidos.
