¿Quieres consolidar tu amistad con alguien? Nada mejor para ello que el sexo, afirma un estudio publicado por Journal of Social and Personal Relationships.

Las películas románticas, nuestros familiares e incluso otras investigaciones nos advierten constantemente que mezclar el coito con la amistad sólo puede tener un resultado bastante fatídico: el término de esa relación.

Peeeero, si los involucrados cuentan con la suficiente madurez y establecen claramente los límites de su nueva dinámica, sin esconder segundas intenciones, existe una amplia probabilidad de que su amistad se fortalezca.

Hablando en números, el estudio aplicado a 300 personas determinó que el 20 por ciento de los casos se aventuró a tener sexo con un amigo en algún momento de su vida, lo que representa una de cada cinco personas.

De ese número, alrededor del 76 por ciento afirmaron que la relación con su bestie mejoró, al haber establecido un lazo más íntimo.

Aproximadamente la mitad de estas personas señaló que tras su encuentro sexual comenzaron a salir en plan de pareja, a pesar de que esa no era su intención original. 

La otra mitad dijo que se mantuvo como amigos, con un mejor vínculo. Sin embargo, también hubo relaciones que se fracturaron de manera definitiva.

De acuerdo con el estudio, la diferencia entre los buenos y malos resultados parece estar relacionada con si los hombres y las mujeres tienen claras sus intenciones

Sexo con amigos, ¿una buena decisión?

Por ejemplo, si alguno siente que la actividad sexual realmente "significaría algo" para su amigo, pero no para sí mismo, y de todos modos se aventura, la calidad de la amistad puede sufrir un daño irreparable, principalmente por la incertidumbre que podría surgir sobre los objetivos de la relación.

Ante ello, la doctora Heidi Reeder, miembro de la Boise State University, en Estados Unidos, recomienda: 

Si no puedes "leer" con precisión las intenciones de tu amigo y deseas mantener una fuerte amistad, es mejor hablar directamente con tu amigo sobre lo que significaría la actividad sexual entre los dos".

Heidi Reeder, doctora.

Reeder advierte que el objetivo del estudio no es alentar o normalizar el sexo entre amigos, sino destacar el hecho de que existen amistades tan sólidas, que son capaces de superar un encuentro sexual.

Y continúa: los amigos que son claros acerca de sus intenciones no siempre actúan como incómodos ligues que tras un encuentro sexual se dan cuenta que todo pasó demasiado rápido. Esto, según explica, se debe a que:

“Los amigos saben con quién están tratando y tienen una base de confianza”.

Con información de Psychology Today.