Para nadie es un secreto que Akira Toriyama fue uno de los mangakas más reconocidos a nivel mundial, gracias a Dragon Ball y es que su filosofía tuvo mucho que ver en el éxito la serie.
Sin embargo, pocos saben lo que había detrás del éxito de Dragon Ball, pues la filosofía de vida de Akira Toriyama impactó directamente en todas sus creaciones.
Pues el autor se alejaba completamente de lo tradicional en su forma de ser, incluso al día de hoy era una especie de anomalía en el mundo del entretenimiento japonés e internacional.
Lo cual al final se tradujo en un éxito rotundo en casi todo lo que hizo, siendo amado por todo el mundo que llegó a conocer su obra de una u otra manera.
Akira Toriyama creó Dragon Ball bajo la filosofía de que “todo tiene que ser divertido”
Akira Toriyama no se ajustaba al estilo japonés en ningún sentido, el mismo se describía como alguien flojo que no le gustaba la formalidad ni las responsabilidades.
Por ello Akira Toriyama evitada cualquier clase de entrevista y apariciones en público; para él, las cosas tenían que ser divertidas, si no no valía la pena hacerlas.
Fue bajo esta premisa que se dedicó al mundo del manga, primero como ilustrador y luego concursando para diferentes editoriales.
Si bien no tuvo éxito en un principio, llamó la atención de Kazuhiko Torishima, editor de Shueisha y la Shonen Jump.
Su alianza dio como resultado primero la creación de Dr. Slump y después la de Dragon Ball.
Kazuhiko Torishima mencionó que trabajar con Akira Toriyama fue todo un reto, pues en verdad no le gustaba mucho la responsabilidad, era bastante distraido y muy flojo.
Toriyama siempre criticó la cultura laboral japonesa, que lleva al límite a hombres y mujeres sin permitirles un momento de diversión en sus vidas.
Curiosamente eso fue lo que llevó a Dragon Ball al éxito, pues el manga no era solemne como otros de la época, explotaba a más no poder el humor y las referencias de los gustos de su creador.
El mismo editor señala que Goku era un muy parecido a Toriyama, y eso era lo que encantaba al público, pues era un niño y después un adulto, que no se tomaba las cosas muy en serio.
Alguien que quería una vida sencilla, haciendo lo que más le gusta, a pesar de ser tachado de irresponsable; pues dentro de todo ese caos, encontraba un orden.
El éxito de Dragon Ball, más allá de su acción o violencia, se debió a que era un manga divertido al final del día, con el que cualquier persona de cualquier parte del mundo se podía identificar.
“Siempre superarse” también era parte de la filosofía de Akira Toriyama y Dragon Ball
Kazuhiko Torishima señala que al final encontró una manera de trabajar plenamente con Akira Toriyama.
Además de ver por la diversión, Akira Toriyama también tenía una personalidad perfeccionista, una combinación bastante curiosa en una persona.
Veía el superarse a sí mismo como al divertido. Para que Dragon Ball siempre saliera a tiempo, el editor le llegaba a decir que sus dibujos no eran tan buenos, aunque fueran perfectos.
Esto hacía que Toriyama se esforzara más para la siguiente entrega, lo cual dio cómo resultado las mejores secuencias de acción que tiene la franquicia.
La superación es otro de los ejes de Dragon Ball, sus personaje siempre están en un constante círculo virtuoso para ser mejores.
Goku queriendo ser el más fuerte, Vegeta queriendo superar a Goku pero también ser un buen padre y esposo, Gohan siendo el mejor estudiante y médico; entre otros ejemplos.
La obra y vida de Toriyama se cimentó en esos principios, divertirse, no tomarse las cosas tan en serio; pero al mismo tiempo, buscar la manera de siempre ser la mejor versión de uno.
Así fue como Akira Toriyama, un hombre que no se ajustó a la tradición, más por flojera que por rebeldía; tuvo un impacto tremendo en millones de personas.
Con información de Screen Rant y The Den of Dragon Ball.