Crusader Kings III: Royal Court’ es la expansión que el juego necesitaba, pues nos lleva a gestionar como tal un reino de manera más íntima incluso que el juego base.

Como su nombre lo indica, ‘Crusader Kings III: Royal Court’ se sitúa en medio de la corte real, que presidiremos desde nuestro trono, decidiendo el futuro del reino.

En ‘Crusader Kings III: Royal Court’ atenderemos peticiones de todo tipo y tendremos que hacer uso de nuestras mejores dotes políticas virtuales para mediar en cientos de conflictos.

‘Crusader Kings III: Royal Court’

Si bien parece algo sumamente aburrido, la realidad es que ‘Crusader Kings III: Royal Court’ logra que la tarea politiquera se vuelva divertida y no el ridículo espectáculo que muchos conocen.

Claro que ‘Crusader Kings III: Royal Court’ tiene algunos puntos cuestionables; pero en general se trata de un desarrollo muy bueno por parte de Paradox.

Veamos todo lo que implica meterse en el oscuro mundo de los reyes en ‘Crusader Kings III: Royal Court’.

¿Qué es ‘Crusader Kings III: Royal Court’?

Crusader Kings III: Royal Court’ es la expansión del juego homónimo, el cual, si jugaste como un rey en la campaña principal, te pondrá en medio de las interminables sesiones de la corte real.

En ‘Crusader Kings III: Royal Court’ tendrás que lidiar con embajadores, otros reyes, tus súbditos y asesores, todos te traerán sus problemas para que, como el rey que eres, los resuelvas.

Así estarás encerrado en una habitación durante toda la expansión, no podrás ir a otro lugar en ‘Crusader Kings III: Royal Court’, a menos que regreses a la campaña principal.

Esto bien podría molestar a algunos jugadores, que buscan un mayor dinamismo en ‘Crusader Kings III: Royal Court’; sin embargo los veteranos de la saga agradecerán este concepto.

‘Crusader Kings III: Royal Court’

‘Crusader Kings III: Royal Court’ más que obligarte a gestionar recursos para la guerra, te pide que veles por todas las cosas “mínimas” del reino, tomando en cuenta que tus elecciones tendrán consecuencias.

Ponerte a favor de un embajador en ‘Crusader Kings III: Royal Court’ podría traer problemas en las relaciones diplomáticas con otro reino, lo mismo que no atender alguna solicitud de los aldeanos.

Necesitas toda tu astucia y conocer muy bien el reino que has creado para salir avante en ‘Crusader Kings III: Royal Court’, más porque incluso esta expansión se puede alargar por varios años (dentro del juego).

‘Crusader Kings III: Royal Court’ comparte el mismo sistema de “edad” del juego base, mientras vayas expandiendo el reino y manteniendo tu dinastía, los problemas en la corte real se mantendrán con el tiempo.

‘Crusader Kings III: Royal Court’

Una mala decisión tomada por tu antecesor en ‘Crusader Kings III: Royal Court’, puede traerte consecuencias a ti, a tus hijos o a tus nietos; igual una buena decisión puede resultar benéfica 100 o 200 años después.

‘Crusader Kings III: Royal Court’ exige una gran planeación estratégica de tu parte; aunque suene algo engorrosa, la realidad es que es muy accesible, sobretodo si ya te acostumbrarte al título original.

¿Cómo se ve ‘Crusader Kings III: Royal Court’?

Crusader Kings III: Royal Court’ mantiene el mismo estilo estético del juego base, eso significa que no destaca en realidad en su apartado gráfico.

Prácticamente todo lo que vemos en ‘Crusader Kings III: Royal Court’ es la sala de la corte real, algunas imágenes estáticas de los mapas y pequeñas escenas con los personajes.

Obviamente el diseño de estos en ‘Crusader Kings III: Royal Court’ es del estilo ya conocido, con una apariencia un tanto tosca, lo cual puede chocar con algunas personas que no gusten de estos visuales.

Aunque esto ayuda en algunos aspectos para ‘Crusader Kings III: Royal Court’, pues esta poca carga gráfica hace que la expansión sea muy estable al momento de ejecutarse.

‘Crusader Kings III: Royal Court’

Si tienes una máquina de gama media o con las especificaciones mínimas recomendadas, no te preocupes, que ‘Crusader Kings III: Royal Court’ no afectara el desempeño.

En cuanto a los efectos de sonido y música de ‘Crusader Kings III: Royal Court’, aplica lo mismo que con los gráficos, pues simplemente cumplen su cometido.

Dado que no hay batallas en ‘Crusader Kings III: Royal Court’ y todo se reduce a un salón, la mayoría de los sonidos con cosas ambientales con respecto a este tipo de escenarios.

Si bien puede parecer algo aburrido, la verdad es que le da cierto aire de realismo a ‘Crusader Kings III: Royal Court’, pues de verdad te sientes en una de estas reuniones multitudinarias.

¿Vale la pena ‘Crusader Kings III: Royal Court’?

Si te gustó el juego base, sin lugar a dudas apreciarás el contenido que es ‘Crusader Kings III: Royal Court’, al darle un nuevo tipo de inmersión a la obra.

Aunque suene un tanto aburrido, meterse en toda la politiquera de ‘Crusader Kings III: Royal Court’ llega a ser fascinante e incluso adictivo en algunos aspectos.

De verdad te sientes como un rey tratando de resolver todos y cada uno de los aspectos mínimos del reino en ‘Crusader Kings III: Royal Court’.

‘Crusader Kings III: Royal Court’

Claro que si tu estilo de juego es algo más activo o prefieres crear tu dinastía acumulando territorios, ‘Crusader Kings III: Royal Court’ no parece el contenido adecuado.

Básicamente deja de lado todo lo que se puede experimentar en el juego principal, en favor del mencionado acercamiento íntimo; esto hace que ‘Crusader Kings III: Royal Court’ se sienta como un contenido donde haces nada.

Aún así, deberías de darle una oportunidad a ‘Crusader Kings III: Royal Court’, pues te podría sorprender con su premisa que oculta gran complejidad en su simplicidad.