La explosión de una bomba atómica es uno de los eventos más destructivos y brutales que se pueden atestiguar. Antes de que se lanzaran los ataques al territorio japonés en la Segunda Guerra Mundial, el gobierno de Estados Unidos probó su nueva arma para medir su eficacia.

El evento se dio en julio de 1945, días antes de las explosiones en Japón, en el desierto de Nuevo México, donde se probó la bomba Trinity, el primer prototipo de una bomba atómica; si bien el video original estaba muy dañado, un restaurador pudo arreglar todos los desperfectos, para presentarnos cómo fue esa primera explosión.

Los resultados de la prueba fueron una bola de fuego que se expandió 600 metros, un hongo que llegó a los 10 kilómetros de altitud, una onda de choque de 160 kilómetros y la arena del desierto cristalizada.

Por un tiempo, se dijo que se había tratado de un accidente en un campo de deshechos, hasta que el ejército estadounidense lanzó los devastadores ataques que acabarían con el conflicto bélico.

Con información de Gizmodo.