A través de su página oficial, la NASA dio a conocer que, con el propósito de estudiar los cambios en la atmósfera terrestre a través de las nubes esquivas o PMC, las cuales se destacan por poseer cristales de hielo; esta creará sus propias nubes artificiales.

Y es que las nubes esquivas, de acuerdo con la NASA podrían estar asociadas directamente con el enfriamiento en la atmósfera superior, ya que “están ocurriendo justo al borde de la viabilidad en la atmósfera superior” dijo el físico espacial de la Universidad de Alaska, Richard Collins.

“Son un indicador muy sensible de los cambios en la atmósfera superior: cambios en la temperatura y / o cambios en el vapor de agua”. 

Fairbanks, autor principal del artículo.

Para probar la teoría y comprender la microfísica del proceso de creación de las nubes esquivas, la NASA creo unas nubes artificiales mediante el lanzamiento de un ‘cohete suborbital’, el “Super Soaker”, durante el mes de enero en Alaska.

¿Cómo crearon las nubes esquivas?

El cohete “Super Soaker” de la NASA se lanzó en Alaska con 219.992 litros de agua a una altura de 85.2952 kilómetros, lo que originó una ligera nube artificial esquiva; por lo que se cree que la simple introducción de agua en la región condujo a una caída significativa de la temperatura local.

“Esta es la primera vez que alguien ha demostrado experimentalmente que la formación de PMC en la mesosfera está directamente relacionada con el enfriamiento por el propio vapor de agua”

Azeem.

Sin embargo, esto no significa que el vapor de agua o las nubes artificiales bajarán la temperatura, pues las nubes esquivas actúan como un termostato. Si el vapor se congela se crean los cristales de hielo, si la temperatura aumenta se evaporan y el ciclo se repite.