De acuerdo con una investigación dirigida por el doctor Stanislav Martyanov del Instituto de Oceanología Shirshov, que se publicó en Researchgate; para septiembre de 2055, el Océano Ártico ya no estará cubierto de hielo debido al cambio climático.
Para esta investigación, el doctor junto con su equipo realizaron varias simulaciones sobre el impacto del aumento de los niveles de gases de efecto invernadero en el Océano Ártico.
“Tomamos en cuenta factores como una disminución de la capa de hielo, cambios de temperatura y salinidad.”
Stanislav Martyanov
Entre los resultados, también se determinó que para finales del siglo XXI, en el 2100, el periodo de deshielo en el Océano Ártico aumentará hasta abarcar cuatro meses, estos serán entre julio a noviembre.
Este deshielo del Océano Ártico tendrá como parte de sus consecuencias “una disminución en la concentración de nutrientes en el Atlántico Norte”, un aumento del nivel en el Mar de Pechora el cual causaría algunas inundaciones, y en la región del Mar Báltico los inviernos extremadamente cálidos aumentarán.
Todo esto se debe a que el Océano Ártico se está calentando a una velocidad mayor que el resto de la tierra, y en su deshielo también influye la llamada “atlantificación”.
¿Qué es la atlantificación del Océano Ártico?
A grandes rasgos, la atlantificación es un cambio en la estructura del Océano Ártico, debido al intercambio de aguas con el Océano Atlántico, el cual acelera el deshielo del Ártico por la liberación de calor desde el interior del océano hacia la superficie.
“La temperatura del agua en la zona, (…) hace que la columna de agua cambie y penetre al Ártico mayor cantidad de agua atlántica. Esto es lo que se llama atlantificación del Ártico”
Carolina Gabarró, investigadora del Instituto de Ciencias del Mar
De acuerdo con la BBC, el término "atlantificación" fue usado por primera vez en un estudio del científico Polyakov, publicado en la revista Science en el 2017, quien señaló que el Océano Atlántico estaba enviando a las cuencas polares, en el Océano Ártico, aguas más cálidas y con mayor salinidad que anteriormente.