Paper Mario: The Thousand Year Door, fue un juego RPG lanzado hace ya veinte años para el GameCube, en aquel entonces tuvo un muy buen recibimiento por los videojugadores.
Siendo una secuela de la entrega de Nintendo 64, Paper Mario: The Thousand Year Door es uno de los juegos más queridos de Mario de aquella consola.
Ahora, para seguir con la tendencia a la que nos ha acostumbrado “La Gran N”, llega nuevamente al mercado un remake para el Nintendo Switch.
Aquí te platicamos un poco de las características de esta versión.
¿De qué trata Paper Mario: The Thousand Year Door?
Paper Mario: The Thousand Year Door comienza con la leyenda de un tesoro que se encuentra debajo de una ciudad llamada Villa Viciosa.
Al enterarse de ello la Princesa Peach se lanza a la aventura hacia dicho lugar, no sin antes pedir la ayuda de Mario; para lo cual le escribe una carta contándole toda la situación y a su vez le proporciona el mapa del tesoro.
Mario al recibir la carta de la princesa, se embarca también en dirección a Villa Viciosa; pero cuando llega descubre que la Princesa Peach ha desaparecido, por lo que ahora no sólo tendrá que encontrar el tesoro legendario sino también a sue amiga.
Es así como inicia Paper Mario: The Thousand Year Door en la que contarás con la ayuda de personajes muy carismáticos que te apoyarán en ganarle la partida a unos villanos bastante graciosos.
El elemento más fuerte de este juego es su historia, la cual es sumamente entretenida y llena de humor.
Estamos seguros que Paper Mario: The Thousand Year Door te hará reír en más de una ocasión con los ocurrentes diálogos y las situaciones en las que se verán inmiscuidos todos los personajes; protagonistas y antagonistas por igual.
Habrá quien diga que no es nada del otro mundo en realidad, sobretodo si la comparamos con RPG más elaborados de otras compañías.
Pero eso no significa que no sea relevante, de hecho es mejor que gran parte de los títulos de Mario, que se basan sólo en la premisa de rescatar a la Princesa.
Pues en Paper Mario: The Thousand Year Door se le mete un extra con el misterio del tesoro y el resto del elenco que es bastante carismático.
¿Cómo se juega Paper Mario: The Thousand Year Door?
Paper Mario: The Thousand Year Door es un RPG por turnos; sin embargo, los enfrentamientos son bastante dinámicos gracias a su sencillez.
Ya que Paper Mario: The Thousand Year Door maneja un estilo como una puesta de teatro, donde Mario y sus aliados pelean contra sus adversarios en un escenario y un variado público acude a ver el espectáculo.
Algo muy original en está mecánica es el hecho que el público puede intervenir directamente en el combate ya sea lanzando piedras que pueden dañar a tus personajes o items que los pueden beneficiar.
Pero no te preocupes, puedes deshacerte oportunamente de aquellos espectadores que quieran perjudicarte presionando ‘X’ en el momento preciso, sólo hay que estar atento.
Asimismo habrá algunos ataques, tanto tuyos como de tus enemigos, que tienen efecto en la escenografía, cosa que puede resultar beneficioso en algunas ocasiones y contraproducentes en otras.
El equipo en Paper Mario: The Thousand Year Door siempre estará integrado por Mario y algún aliado más, al cual podrás intercambiar según tu conveniencia.
Cada uno cuenta con un turno para llevar a cabo acciones ofensivas (ataques, super ataques, ataques especiales), acciones defensivas o saludar al público para llenar el medidor de Poder Estelar, el cual te dará la opción de activar una habilidad especial.
Al atacar y defenderte es esencial presionar el botón en el momento justo. De esto depende que hagas más daño y en la defensiva que recibas todo el ataque o nada.
Entender y sincronizarte con este ritmo te ayudará a obtener la victoria. No te preocupes, si hay algo que te cueste trabajo, Paper Mario: The Thousand Year Door cuenta con el ‘Maestro de combate’ que te dará varios consejos.
Cada que termines un combate conseguirás Puntos Estrellas, cada que obtengas cien de ellos, Mario subirá de nivel y tendrás que elegir el atributo que quieras mejorar.
Para subir el nivel de tus aliados deberás conseguir un item llamado ‘Sol’. Con tres soles el nivel de tus compañeros se incrementará, pero ten en cuenta que este item no es tan simple de obtener, tienes que estar atento a los escenarios para encontrarlo.
Hay que mencionar que Mario irá adquiriendo más habilidades conforme avances en la historia, pero lo gracioso de esto es que estas habilidades son en realidad maldiciones que le lanzan a Mario con la intención de perjudicarlo.
Además de la misión principal, el juego tiene misiones secundarias; distintos personajes de la ciudad pondrán sus peticiones y tú decides cuál tomar. Al cumplir con la petición, obtendrás una recompensa.
¿Cómo se ve Paper Mario: The Thousand Year Door?
Algo que reconocemos de Nintendo es que cuando se trata de remakes de su propio catálogo realmente rehacen el juego por completo, como es el caso de Paper Mario: The Thousand Year Door.
Esta entrega de Paper Mario: The Thousand Year Door visualmente es muy bonita y colorida, y la banda sonora no defrauda, aunque también puedes elegir la banda sonora clásica si te sientes nostálgico.
Entre las mejoras del remake encontramos la facilidad con la que puedes cambiar entre personajes aliados, la consulta de pistas por si llegas a perder tu objetivo y los viajes por tubería que ayudan a que te transportes entre zonas.
Pero sobre todo, Paper Mario: The Thousand Year Door es muy fácil y accesible de jugar, mucho más sencillo que su versión de hace veinte años.
¿Paper Mario: The Thousand Year Door vale la pena?
Parece que Nintendo ha encontrado la fórmula ganadora para seguir explotando su vasto catálogo de antaño, como Paper Mario: The Thousand Year Door.
Todo sin invertir en el desarrollo de juegos y a su vez exprimir todo lo que pueda al Nintendo Switch mientras se acerca cada vez más la inminente llegada de su nueva consola.
Paper Mario: The Thousand Year Door es una gran adición a este final de la era del Nintendo Switch.
Nos preguntamos ¿cuántos remakes más será Nintendo capaz de hacer? Por lo menos con Paper Mario: The Thousand Year Door, parece que han tenido un gran acierto.