Andrew Kunz es un niño de 11 años que vive en Phoenix, Arizona; quien se ha hecho famoso localmente por sobrevivir a un ataque de 400 abejas africanas. Sin embargo, más allá de este logro, su reconocimiento radica en que él asegura que pudo resistir al ataque gracias a que aprendió una técnica de Dragon Ball Z.
Las cosas fueron así, él y un amigo estaban jugando con un rifle de aire, disparando a un auto abandonado en un terreno no habitado; no se dieron cuenta que dentro del mismo había un panal de abejas. Al ver rota la calma, los insectos procedieron a atacar a los jóvenes.
Kunz, quien no pudo resguardarse, decidió aplicar lo aprendido en TV, concentrar su "ki" como lo hace Vegeta en la Saga de Cell, para aumentar su fuerza física y resistir el ataque.
Cuando llegó el auxilio, fue enviado directamente a cuidados intensivos de un hospital cercano. Después de darle los cuidados iniciales, los médicos declararon que evoluciona favorablemente y muy pronto podrá incorporarse a sus actividades diarias.
En entrevista para la televisión el joven declaró: Mi nombre es Andrew; pero tú puedes llamarme Vegeta. Como sea, es buena noticia que haya salido avante.
Con información de Kotaku.