Sonic Frontiers ya está disponible y vaya que ha levantado polémica, pues se ha encontrado con comentarios opuestos acerca de su calidad.
Por un lado la prensa ha señalado que Sonic Frontiers es un juego decente sin aspirar a más, que a pesar de su frescura cae en problemas que parecían superados.
Por su parte los eternos fans del erizo azul han señalado que Sonic Frontiers se trata del mejor juego de la franquicia en 20 años (desde Sonic Adventure).
Nosotros ya pudimos jugarlo y te diremos si existe algo de razón en estas alguna de estas posiciones.
¿De qué trata Sonic Frontiers?
Sonic Frontiers nos pone en un día tranquilo del erizo azul y sus amigos, quienes de un momento a otro se ven absorbidos por una especie de agujero negro.
Una vez despierta, Sonic se da cuenta que está sólo en una isla misteriosa, mientras que sus amigos ahora parecen una especie de fantasmas.
Será deber del erizo encontrar la manera de rescatar a sus amigos y develar los que se oculta detrás de ese lugar, aunque todo indica que Eggman tiene algo que ver en esto.
Sonic Frontiers repite la fórmula clásica de la franquicia, con un Sonic como el héroe único que debe de encontrar la manera de salvar el día.
Si bien la premisa es simple, esta sigue funcionando debido a que se trata de una historia que se va poniendo interesante conforme avanzamos en la obra, con uno que otro giro.
Además de que cuenta con varias referencias a aventuras pasadas de Sonic, lo cual agradecerán los fans de toda la vida.
Aunque si esperas algo más intrincado y que te cambie tu perspectiva de la franquicia, lamentamos informarte que eso no sucederá en Sonic Frontiers.
¿Cómo se juega Sonic Frontiers?
Tardó 20 años, pero por fin con Sonic Frontiers la mascota de SEGA evoluciona en su tratamiento de las plataformas 3D.
El juego es una curiosa; pero efectiva mezcla de plataformas con mundo abierto, donde podremos explorar a placer diversas islas con Sonic, descubriendo secretos y derrotando a diversos enemigos.
Si bien parece que los diversos elementos del mapa están puestos ahí al azar, es esto mismo lo que hace que el juego funcione muy bien en este sentido y sea bastante entretenido.
Aunque hay que mencionar que estas islas se sienten un tanto vacías, ya que fuera de las plataformas y los enemigos, no encontrarás nada más, lo cual le resta variedad al juego.
Por otra parte; Sonic Frontiers hace uso de un sistema RPG, donde podremos mejorar las habilidades del personaje para alcanzar nuevos objetivos o hacer más daños a los enemigos.
Porque eso sí, Sonic ahora es todo un guerrero, pues además de atacar “echo bola”, ahora puede dar golpes y encadenar varios combos que lucen espectaculares.
Aunque nos hubiera gustado que el árbol de habilidades fuera más grande, pues tiene pocas ramas y se siente un poco corto para todo lo masivo del juego.
Finalmente tenemos que mencionar los niveles del ciberespacio, que son homenajes a juegos pasados de Sonic.
Si bien son más como escenarios de bonus, resultan interesantes, pues aquí se recupera el gameplay clásico de Sonic, además de que tienen diversos retos para completar.
En sí el gameplay de Sonic Frontiers es bastante divertido, a pesar de ciertas carencias notorias; pero que al momento de jugar se olvidan por completo.
¿Sonic Frontiers se ve feo?
Aquí no podemos ayudarle al buen erizo azul, Sonic Frontiers sí se ve feo y se nota desde el primer momento que pones el juego.
Los personajes tienen diseños bastante simples, se omite lo más posible los elementos de los escenarios, al grado que en ocasiones parecerá que los personajes están pegados a una pantalla de un solo color.
Los efectos no lucen para nada; como ejemplo tenemos una de las primeras escenas de Sonic Frontiers, donde nos encontramos en una zona con lluvia.
Bueno, pues la lluvia se ve lo más antinatural posible, sólo rayas blancas pintadas en el juego. Y esto se repite en otras zonas.
Tampoco podemos olvidar que sufre de uno de los casos de pop-up más descarados desde la época del PS1, viendo como diversos elementos aparecen de la nada en tu recorrido.
A esto no le ayuda el hecho de que la cámara de Sonic Frontiers también es una de las más incómodas de la actual generación.
Pero aquí no acaban los problemas estéticos; la música tampoco es algo a destacar en Sonic Frontiers, cosa que sorprende, ya que Sonic se caracterizas por sus buenas bandas sonoras.
Aquí todo es genérico a más no poder; aunque podemos destacar que las voces en inglés son muy buenas y le dan carisma a los personajes; además de que cuenta con textos en español.
Eso sí, no hay localización para América Latina, por lo que tendrás una versión ibérica del idioma, algo a tomar en cuenta si es que esto te molesta.
¿Vale la pena Sonic Frontiers?
Sonic Frontiers es un caso especial en el mundo de los videojuegos, pues tanto los que lo atacan como los que lo defienden tienen razón en sus argumentos.
Sonic Frontiers sí es un juego con un diseño descuidado que comete errores que parecían superados desde la época del PS3.
Con un mundo abierto vacío, árbol de habilidades bastante corto, música genérica y unos visuales muy deslucidos.
Pero al mismo tiempo, Sonic Frontiers es ese siguiente paso que la franquicia necesitaba en su acercamiento al 3D, que demuestra el potencial del personaje.
Con diversos elementos que lo hacen divertido y disfrutable, seas fan de Sonic o no.
Sonic Frontiers es mediocre en sus escenarios, con un apartado artístico arcaíco y una historia básica; y aún así, este es el mejor juego de Sonic en 3D de los últimos 20 años.