SVC: Chaos es uno de esos títulos de peleas que aunque salieron en momento complicado para el género, se convirtió en un pilar para este.

Ya que SVC: Chaos fue de los últimos juegos de SNK en salir en arcades, además de terminar con la histórica colaboración con Capcom; siendo también una especie de despedida de su “era dorada”.

Luego de varios años en el olvido, la desarrolladora sorprendió lanzando el juego en una versión actualizada para generación actual.

Si bien el título mantiene su calidad original, este port en realidad agrega muy poco a este, siendo más un objeto anecdótico que un juego indispensable.

SVC: Chaos

¿Cómo es SVC: Chaos?

La versión reciente de SVC: Chaos es una actualización del crossover de lucha entre SNK y Capcom; la cual cuenta con 36 personajes originarios de sagas de lucha conocidas como The King of Fighters, Street Fighter o Samurai Shodown.

SVC: Chaos rompe con el molde tradicional de SNK que había establecido hasta el momento del lanzamiento del título, al tener peleas 1 vs 1, en lugar de las conocidas tercias.

Aunque mantiene su gameplay tradicional, con dos botones de patada y dos de golpe, para poder elaborar tus combos; además de una barra de poder que se llena cuando atacas.

Para esta versión se agregaron algunas cosas extra, tal es el caso del Rollback Netcode que mejora significativamente la experiencia en línea.

SVC: Chaos

La creación de salas y la unión a otras es rápida y sencilla en SVC: Chaos, permitiendo desafiar a otros jugadores en tiempo real.

El modo entrenamiento es otro aspecto positivo de SVC: Chaos, ya que permite practicar y mejorar habilidades sin la presión de la competencia.

Los modos Arcade y Versus ofrecen una variedad de opciones para jugar en línea o fuera de línea, lo que hace que el juego sea accesible para diferentes tipos de jugadores.

Además de que cuenta con una galería especial, donde podemos ver el arte promocional que se lanzó junto con el juego en sus diferentes versiones.

SVC: Chaos

Sin olvidar que cuenta con todo ese factor nostalgia, desde el apartado gráfico, introducción, hasta el hecho de que puedes desbloquear a los personajes extra, algo que ya no se ve en estos días.

Aunque el juego en general esta “bien”, hay algunas cosas que podrían alejar a uno que otro jugador, sobretodo a los que no experimentaron esta obra en su momento.

¿En qué falla SVC: Chaos?

A pesar de la adición de las cosas anteriormente mencionadas, SVC: Chaos se siente más como un juego que desempolvaron de último momento, que un port o remaster bien planeado.

Esto lo notamos en los gráficos y sonido de SVC: Chaos, pues mantiene el estilo de arte pixelado y la música de la versión original, con algunas mejoras en la resolución y filtros.

Pero se nota que no trabajaron realmente en los ajustes para pantallas modernas, pues aplican un marco gigante en el espacio desperdiciado.

SVC: Chaos

También hay que tomar en cuenta que no se hizo una actualización al control, siendo este igua a la versión original; algo que los veteranos agradecerán, pero novatos probablemente despreciarán.

Pues el gameplay de SVC: Chaos es bastante rudimentario, con una inteligencia artificial que puede ser injusta en varios momentos, cosa que será frustrante para más de uno.

También hay que mencionar que fuera del modo arcade, hay pocas opciones par un jugador, no hay modos como Survival o retos de combos, algo tradicional en juegos de peleas desde hace más de 20 años.

SVC: Chaos

¿Vale la pena SVC: Chaos?

En general, la versión reciente de SVC: Chaos está bien a secas, sobretodo para veteranos de los videojuegos y sobretodo fans de los títulos de pelea de SNK.

Alguien que prefiera el estilo moderno u obras de otros estudios, encontrará un tanto innecesaria este regreso de SVC: Chaos.

Pues no te da mucho en realidad, más allá de lo que ya ofrecía en su momento, ni siquiera el tener Rollback la hace una opción interesante para los jugadores competitivos, siendo más un producto que apela a la nostalgia.

Aunque su precio reducido bien puede justificar su existencia, además de que aquellos “arqueólogos de los videojuegos” les parecerá interesante probar una obra de este estilo.