Si algo ha caracterizado a DC Comics en cuanto a medios audiovisuales, es en entregara obras de gran calidad; es cierto, últimamente ha tenido algunos resbalones (The Killing Joke), pero en general los fans no tienen de qué quejarse. Dentro de esta gran oferta nos llega Teen Titans: The Judas Contract, la cual adapta uno de los arcos más importantes de los Titanes casi a la perfección.
Quienes hayan visto la serie de la década del 2000, no les será desconocida la historia. Vemos la historia de Terra dentro del equipo de superhéroes adolescentes, y como trata de lidiar entre el afecto que poco a poco le toma a sus compañeros, sobretodo al Chico Bestia, y la verdadera razón por la que se unió a ellos.
Así, aunque la trama es conocida, la película la presentan de una manera impecable; que te mete de lleno en el conflicto no importando que conozcas el desenlace, lo cual habla muy bien de la producción y creación del guión. Asimismo, actualiza el evento, al tener personajes de reciente creación en la casa editorial, como Jaime Reyes (Blue Beetle) y Damien Wayne (Robin); junto a clásicos de la historia original, dígase Raven, Starfire, el propio Chico Bestia y Dick Grayson (ahora Nightwing).
Hay que mencionar que esta no es una película para toda la familia, cuenta con muchos comentarios de doble sentido (apelando a la inocencia de Starfire); una relación amorosa entre una adolescente y un hombre mayor; y una temática general un tanto pesada para aquellos que busquen algo más jovial. Atendiendo a lo que se vio en el cómic creado por Marv Wolfman y George Perez del cual se tomó inspiración, el cual era mucho más crudo.
En cuanto a la animación, no hay muchos peros que ponerle; si bien se notan algunos errores en ciertas secuencias, estos puede pasarse por alto dado que no afectan en gran medida la inmersión en la obra. De igual manera el trabajo vocal, la actriz Christina Ricci logra capturar la actitud dubitativa, iracunda y desconfiada de Terra, lo mismo que Miguel Ferrer con el letal Deathstroke.
Si de algo hay que quejarnos es de la secuencia inicial, pues no aporta nada en realidad a la obra en su conjunto; es cierto, da pié a una subtrama entre Nightwing y Starfire, pero si se elimina, no afecta al producto final en nada. Hubiera sido mejor que presentaran en esos minutos un poco del pasado de Terra o Brother Blood, quien tampoco tiene un buen desarrollo como villano, si tomamos como referencia a Slade y su ayudante de esta ocasión.
The Judas Contract es una obra que agradará tanto a fans de los Titanes, como fans de DC Comics y del material original (ya sea el cómic de Wolfman o de la serie animada); eso sí, quienes sólo tengan como referente Teen Titans Go, puede que les resulte un tanto agresiva, al tener un tono mucho más obscuro.