Estados Unidos.- Los archivos inéditos sobre el asesinato de John F. Kennedy previstos a hacerse públicos este jueves 26 de octubre, después de 20 años bajo reserva, podrían ubicar al gobierno mexicano como un actor utilizado por autoridades estadounidenses para mantener en secreto esos documentos, al argumentar que la divulgación de los mismos podría haber afectado al gobierno mexicano en turno.
En entrevista con la agencia EFE, el juez federal John R. Tunheim, presidente del comité investigador independiente habilitado entre 1994 y 1998 para examinar y publicar los documentos oficiales sobre el homicidio del presidente en 1963, dijo que el Departamento de Estado estadounidense y la Agencia Central de Inteligencia (CIA, por sus siglas en inglés) convencieron a su comité de que no publicara los detalles de "los acuerdos" que tenía EU para compartir inteligencia con México, por temor a que eso hiciera caer al gobierno mexicano, emanado del PRI, que estaba entonces en el poder.
"Publicar cómo un Gobierno extranjero comparte inteligencia con la CIA puede ser controvertido, y creo que eso les preocupaba, porque el partido político que estaba en el poder en México en los años 90 era el mismo que había estado en poder en los 60", dijo Tunheim, que se desempeña como juez federal en Minnesota.
Según informes de prensa, los acuerdos entre EU y México permitieron a la CIA vigilar las embajadas de Cuba y la Unión Soviética en la Ciudad de México, a donde el presunto asesino de Kennedy, Lee Harvey Oswald, arribó 6 semanas antes del asesinato del presidente.
En 1998, al Departamento de Estado y la CIA les preocupaba divulgar "cómo se compartía inteligencia" como "el mero hecho de que hubiera acuerdos para trabajar" con la agencia de inteligencia estadounidense, dado que en algunos países eso podría derivar en controversias.
"No creo que esas preocupaciones sean relevantes ya, así que toda esa información debería publicarse ahora", opinó el juez, quien descartó que la información suponga un cambio radical en lo que hasta hoy se conoce del caso.
"Será interesante obtener detalles sobre los métodos de inteligencia que se usaban en los 1960 para tratar de recabar información no solo sobre Lee Harvey Oswald, sino sobre otros", agregó.
De acuerdo con la BBC, Lee Harvey Oswald, el presunto tirador, viajó a México el 26 de septiembre de 1963, para visitar las embajadas de Cuba y la Unión Soviética, país que visitó años atrás y donde incluso contrajo matrimonio. Jack Ruby lo asesinó el 24 de noviembre de 1963, apenas 2 días después del homicidio del presidente estadounidense y de su captura como principal sospechoso del crimen.