Estados Unidos.- El abogado neoyorquino Aaron Schlossberg amaneció esta mañana como uno de los hombres más famosos de internet luego de ser exhibido en un video en el que amenaza a empleados de un restaurante en Midtown Manhattan que hablaban en español.
Luego de que la grabación trascendiera hasta medios estadounidenses nacionales, usuarios de redes sociales comenzaron a divulgar algunos datos de la vida pública de Schlossberg, entre ellos antecedentes de otras expresiones de racismo y el hecho de que el sitio web de su firma de abogados presuma que cuentan con representantes "en español".
Luego de que The New York Post le dedicara una fuerte portada con palabras en español, uno de sus reporteros fue a buscarlo a las afueras de sus oficinas donde, de acuerdo con reportes, durante todo el día se realizaron diversos tipos de manifestaciones.
En la grabación, que fue difundida a través de diversas plataformas, se observa al abogado con un gorro y un paraguas con el que se cubre de las cámaras de los periodistas. Schlossberg decide no responder los cuestionamientos y llama a la policía para denunciar una supuesta agresión.
{username} (@MyDaughtersArmy) May 17, 2018
Otro video publicado en Facebook, por un joven identificado como Andrew Ramos, lo muestra dentro de una corte de Nueva York esta mañana. En una de las salas, Ramos se encuentra con el abogado racista y le pregunta cómo se siente después de su video viral.
EXCLUSIVE UPDATE: Just happened - I confronted Aaron Schlossberg outside court in Queens. He surprisingly had nothing to say about his racist rant. This is the FIRST time we see him after he went viral. He literally chuckled after another attorney told him he should be disbarred.
Posted by Andrew Ramos on Thursday, May 17, 2018
De acuerdo con medios locales, los propietarios del edificio que alojaba una de las oficinas de Schlossberg, ubicada en el número 275 de Madison Avenue, decidieron rescindir el contrato de renta del espacio de trabajo tras entrarse de la postura discriminatoria de su cliente. Además, el congresista Adriano Espaillat presentó una queja ante el Sistema de Cortes de Estados Unidos (EU) por considerar que ese tipo de conductas son humillantes y denigrantes, por lo que no tienen cabida dentro del espacio público de la nación.