En España, las autoridades investigan a un falso veterinario, identificado como Luis Miguel, por drenar hasta la muerte a más de 500 perros para comercializar con su sangre.

Este caso surgió a raíz de que un empleado de la incineradora del pueblo de Yuncos, España, denunció que cada 15 días recogía demasiados perros muertos en las bolsas de basura, por lo que decidió alertar a las autoridades.

Tras investigar la denuncia, Luis Miguel, el falso veterinario fue detenido porque tenía un banco de sangre animal sin que se comprobara su profesión.

Un caso de crueldad animal en España de 16 años

De acuerdo con la Fiscalía General de España y el Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil, esto se trata de un caso de crueldad animal masivo contra más de 500 perros en un lapso de 16 años.

Lo anterior debido a que el hombre fundó su compañía como banco de sangre veterinario desde 2006, pues en España el mercado de sangre animal es pequeño y completamente privado.

Según la investigación, Luis Miguel se convirtió en uno de los proveedores únicos en España de bolsas de sangre necesarias para múltiples intervenciones veterinarias.

El Centro de Transfusión Veterinario, como se llamaba la empresa de Luis Miguel, logró acumular clientes a nivel nacional e internacional.

Y de acuerdo a la Guardia Civil, habría evidencia de al menos 500 animales muertos debido a las crueles prácticas del centro. Se ha logrado comprobar que, entre abril y mayo de 2022, drenaron hasta matar a 60 animales, específicamente perros y gatos.

También se informó que muchos de los animales que llegaban a la finca Humanes, el lugar donde operaba el centro de transfusiones, eran entregados por sus familiares porque era vista como una protectora, pero no fue así.

Perritos

Rescatan a 275 perros del centro de transfusión en España

La Guardia Civil informó que se lograron rescatar a 275 perros y otros animales cuando arrestaron a Luis Miguel; algunos sanos y otros en proceso de recuperación.

Detallaron que la manera de drenar a los animales era hasta matarlos por shock hipovolémico, es decir, por pérdida de sangre excesiva al mandar una manguera directo al corazón y drenarlos mientras aún seguían vivos.

Testimonios de veterinarios en España señalan que en general, hay pocos donantes de sangre para perros, por lo que se apoyan de bancos de sangre que no están regulados como el de este caso.

En cuanto al hombre detenido, las autoridades de España lo acusan de “intrusismo”, ya que no era veterinario y las prácticas que ejecutaba solo las podían hacer profesionales acreditados y graduados.

Aunque también se busca que se investigue por violentar la norma sobre bienestar animal.