El Tribunal Constitucional Plurinacional (TCP) de Bolivia emitió una sentencia que impediría a Evo Morales buscar la reelección como presidente de dicho país.
Además, la resolución lo deja fuera de intentar ocupar un cargo de poder en el país sudamericano, esto en el marco de las elecciones que se llevarán a cabo en 2025.
Cabe recordar que Evo Morales es investigado por las autoridades de Bolivia, tras ser señalado por el delito de trata de personas.
Evo Morales no podrá volver a ser presidente de Bolivia ni ocupar otro cargo de poder
El TCP dio a conocer su decisión de ratificación de una medida, la cual fue emitida el pasado 1 de noviembre, pero publicada de manera oficial hasta el viernes 8 de noviembre.
Esta aborda la imposibilidad de una segunda reelección presidencial de manera consecutiva o discontinua en el país, cerrando los caminos para una eventual candidatura de Evo Morales en los comicios de 2025.
Por tal motivo la Constitución no se modificará, reiterando que solo está permitido una reelección sin importar si es de forma continua o no.
Es decir, Evo Morales ya cumplió este apartado de ley, toda vez que resultó electo en 2005 y reelegido en dos ocasiones más en 2009 y 2014.
Por tal motivo Morales no podrá aspirar a ocupar la presidencia de Bolivia por un cuarto periodo.
La decisión del TCP es resultado a una solicitud enviada a las autoridades, en donde se analizó un recurso presentado por el diputado José Carlos Gutiérrez, del partido Creemos.
El documento señaló que, además de la presidencia, no se podrá aspirar a ocupar la vicepresidencia, ni tampoco presidir el Congreso.
Investigan a Evo Morales por la probable comisión del delito de trata
La Fiscalía de Bolivia emitió el pasado 11 de octubre una orden de aprehensión en contra de Evo Morales por el delito de trata de personas.
Esto tras negarse a presentar su declaración, por lo que se tomó la decisión de girar una orden para que Evo Morales se presente a declarar, esto dada por su implicación en un caso de trata de personas y de abuso de menores.
El ex presidente de Bolivia se encontraba citado a declarar ante las autoridades, negándose a ello por argumentar que todo se trata de un caso de persecución política.