Con fotos se ha reportado que el Monte Fuji sufre el efecto del cambio climático y por primera vez en 130 años no tiene nieve.
Al parecer el cambio climático cada vez se hace más evidente, luego de que el Monte Fuji terminará el mes de octubre sin nieve.
Situación que ha sido captada con fotos entre los turistas y locatarios sorprendidos, pues al Monte Fuji no se le veía sin nieva hace ya 130 años.
Así se ve el Monte Fuji sin nieve por primera vez en 130 años
El pico más alto de la isla de Honshu y de todo Japón ha sorprendido a turistas y sus propios habitantes tras lucir su postal sin nieve.
Suceso que no se veía en el Monte Fuji desde hace 130 años y que se da de manera sorpresiva que delatan el retraso de la nieve.
Pues generalmente a el Monte Fuji se le ve ya con nieve en el mes de octubre, según los registro de la caída de nieve.
Pues basta decir que en 2023, la nieve empezó a caer para cubrir el Monte Fuji el 5 de octubre.
Mientras que los registros de los retrasos más largos de la caída de nieve en el Monte Fuji son de 1955 y 2016, cuando nevó el 26 de octubre en ambos años
Los efectos del cambio climático son los culpables de que Monte Fuji no tenga nieve
Ante la vista de un Monte Fuji sin nieve, los expertos atribuyen este hecho a los efectos del cambio climático.
Pues dice que la ausencia de nieve en los 3 mil 776 metros del Monte Fuji refleja un cambio en los patrones climáticos.
Mismos que no solo afectan a la naturaleza del Monte Fuji y la biodiversidad de la región, sino, hasta a la economía del lugar al ser uno de los sitios turísticos más importantes en Japón.
Por lo que ya se habla de que este cambió sin nieve del Monte Fuji es el resultado del clima veraniego en el que el archipiélago nipón..
Pues este año se ha tenido el verano más caluroso de su historia, con temperaturas que superaron los 40 grados en los días más extremos entre junio y agosto.
Asimismo, como en septiembre, las temperaturas en Japón fueron más cálidas de lo esperado, y aproximadamente 1.500 zonas del país experimentaron días clasificados como “extremadamente calurosos”, superando los 35°C.
Y pese a que en el mes de octubre el calor bajó considerablemente, este siguió siendo un mes más cálido que la media esperada, de modo que el Monte Fuji se llevó las consecuencias.