Mucha gente suele acudir al quiropráctico para aliviar dolores de espalda, cuello, hombros y hasta de la cabeza.

Si tú eres de esas personas, quizás ahora lo quieras pensar mejor al conocer el caso de una mujer que murió tras acudir con el quiropráctico.

Se trata de Joanna Kowalczyk, de 29 años de edad, residente de Newcastle, Inglaterra, quien murió después de acudir con un quiropráctico para tratar un dolor de cuello.

Masaje de spa

Mujer acudió al quiropráctico en lugar de al hospital y murió días después

El caso de la mujer que acudió al quiropráctico y murió días después, fue reportado por el New York Post.

Medio que señaló que en septiembre de 2021, Joanna Kowalczyk, sufrió una lesión conocida como disección arterial o desgarro en el revestimiento de una arteria.

Esto sucedió durante una sesión de entrenamiento personal en un gimnasio.

La mujer optó por tratamientos alternativos en lugar de acudir al hospital para sanar su lesión.

Joanna Kowalczyk también padecía regularmente de migrañas y tenía problemas de hipermovilidad en las articulaciones, padecimientos que estaban incluidos en su historial médico.

Su quiropráctico omitió verificar dichos padecimientos y la mujer sufrió graves consecuencias después de que le “ajustaron el cuello” durante un masaje.

De acuerdo con el Daily Mail, Joanna Kowalczyk recibió cuatro tratamientos de “ajustes y manipulación” entre septiembre y octubre de 2021.

Pero, fue tras la sesión del 16 de octubre que empezó a tener “síntomas inmediatos de mareos y sensación de que la habitación daba vueltas”.

Luego, la mujer tuvo visión doble, hormigueo en la mano derecha y el pie derecho, además de vómitos.

Lo más grave fue que, después de ello, Joanna Kowalczyk comenzó a tener dificultades para hablar, situación que la llevó a solicitar ayuda de paramédicos.

Quiropráctico

Tratamiento quiropráctico habría provocado la muerte de la mujer

La mujer que murió tras acudir al quiropráctico, tenía un nivel de conciencia reducido, por lo que requirió ayuda de paramédicos y le suministraron oxígeno mientras la trasladaban al hospital.

Los exámenes médicos descubrieron tejido cerebral muerto y un desgarro en la pared de uno de los vasos sanguíneos del cuello.

Dos días después, el 19 de octubre de 2021, Joanna Kowalczyk murió.

Leila Benyounes, asistente forense, dictaminó que la mujer murió a consecuencia del “tratamiento quiropráctico posterior a un evento médico natural”.

El caso de Joanna Kowalczyk hizo que se instara al Consejo Quiropráctico General de Inglaterra a establecer reglas que obliguen a los profesionistas a verificar el historial médico de sus pacientes antes de tratarlos.

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