México.- El secretario de Seguridad Pública durante el gobierno de Felipe Calderón, Genaro García Luna, está relacionado con los empresarios Mauricio Samuel y Alexis Weinberg.

Esto porque supuestamente García Luna rentó residencias lujosas en Miami, propiedad de los Weinberg, de acuerdo con una investigación de la periodista Peniley Ramírez publicada por El Universal y por la que fue entrevistada en Aristegui Noticias.

Ramírez explicó que en 2012 descubrió que García Luna viajaba con frecuencia a Miami, Estados Unidos. Encontró que Linda Cristina Pereyra, esposa del ex funcionario federal, tenía un café en sociedad con un colombiano, que a su vez era socio de Mauricio Samuel y Alexis Weinberg.

Entre 2009 y 2012, contó la periodista en Aristegui Noticias, los Weinberg invirtieron 36 millones de dólares en 19 departamentos y un terreno en Miami. Algunos estaban a nombre de Mauricio Samuel y Alexis, pero otros a nombre de Sylvia Pinto Mazal.

García Luna también habría fundado las consultorías GL an Associates Consulting así como Delta Integrator; éstas compartían dirección fiscal con empresas de Weinberg, sin embargo, negaban tener relación.

Al mismo tiempo, pero en México, García Luna se empezó a acumular una riqueza que no concordaba con sus percepciones como titular de la Secretaría de Seguridad Pública de Felipe Calderón. 

Dirección fiscal de joyería era "bunker de seguridad"

La investigación periodística también revela que Sylvia Pinto Mazal es socia de una joyería propiedad de Julia Abdala, la actual pareja del titular de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), Manuel Bartlett.

Esta joyería tiene dirección fiscal en Polanco, y en ese lugar en 2012 era un “bunker de seguridad” donde trabajaban empleados de la coordinación de asesores de García Luna de la SSP para ICIT, una empresa de los Weinberg donde hacían análisis y monitoreo de información.

De acuerdo con testimonios que entrevistó Ramírez, los empleados utilizaron software, que también se había utilizado en la SSP, de manera irregular. También descubrió que resúmenes de información que le llegaban a los clientes de ICIT eran los mismos que García Luna le enviaba a Felipe Calderón.

Por una multa de tránsito que el exfuncionario tuvo en 2015 en Miami, descubrió que Luna vivía en una lujosa propiedad de los Weinberg y en 2016 se mudó a otra de los mismos dueños. Los empresarios afirman que le rentaban la casa a extitular de la SSP, pero no hay evidencia.