La guerra entre Rusia y Ucrania llega a su día 233 desde su comienzo el pasado 24 de febrero, cuando el presidente ruso Vladimir Putin ordenó una “operación militar especial” para liberar a la población prorrusa de la región ucraniana de Donbás.
Hoy viernes 14 de octubre la guerra llegó a su día 233, en el que la Organización de Naciones Unidas (ONU) considera las violaciones en Ucrania “una estrategia militar”.
Mientras que la Organización del Tratado Atlántico del Norte (OTAN) decidió brindar más apoyo a las defensas antiaéreas de Ucrania, a pesar de la amenaza de Rusia de una posible Tercera Guerra Mundial, en caso de que anexen al país gestionado por Volodímir Zelenski a sus filas.
Después de la reunión entre Vladimir Putin y Recep Tayyip Erdogan, el presidente turco, ordenó a su gobierno comenzar a trabajar para crear un “centro gasístico” en Turquía, propuesto por su par ruso Vladimir Putin para exportar a Europa el gas de Rusia, informaron el viernes medios turcos.
Por otra parte el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, prometió este viernes la victoria de su ejército contra Rusia durante el Día de los Defensores del país, que por primera vez se celebra bajo la invasión rusa, iniciada hace casi ocho meses.
Rusia ordena que el puente de Crimea esté reparado para julio de 2023
Rusia anunció este viernes que ordenó la reparación antes del 1 de julio de 2023 del puente de Crimea, parcialmente destruido por una explosión el sábado 8 de octubre de la cual acusa a Ucrania.
El gobierno “decidió la fecha límite del 1 de julio de 2023 para el final de los contratos del Estado para la ejecución de las obras”, señala una orden firmada por el primer ministro ruso Mijail Mishustin, en referencia a los trabajos en ese puente, símbolo de la anexión rusa de la península ucraniana de Crimea y crucial para el suministro de las tropas rusas.
Los servicios de seguridad rusos (FSB) calificaron la explosión de “ataque terrorista” y afirmaron que fue llevado a cabo por los servicios ucranianos de inteligencia.
Según el FSB, un agente de Kiev organizó el tránsito de los explosivos por varios países y estuvo en contacto con los diferentes intermediarios.
Como represalia, Rusia bombardeó varias ciudades de Ucrania el lunes y el martes. Los ataques impactaron entre otros sobre las infraestructuras energéticas y provocaron cortes de electricidad y de agua en todo el país.
El miércoles, el FSB dijo que había detenido a ocho personas -cinco rusos y “tres ciudadanos ucranianos y armenios” -sospechosos de participar en este ataque.
OTAN acelera el apoyo a las defensas antiaéreas de Ucrania
Los países de la OTAN van a redoblar sus esfuerzos por mejorar las defensas antiaéreas de Ucrania tras los últimos ataques rusos con proyectiles a centros urbanos e infraestructuras críticas en todo el país, y entregarán equipos inhibidores de drones o sistemas de misiles como las cuatro lanzaderas HAWK ofrecidas por España.
”La OTAN no es una parte en el conflicto. Pero seguiremos apoyando a Ucrania durante el tiempo que sea necesario”
Jens Stoltenberg, secretario general OTAN al término de una reunión de dos días de los ministros aliados de Defensa
Los ministros aliados mantuvieron anoche una cena de trabajo con su homólogo ucraniano, Oleksii Reznikov, quien también participó ayer en la sexta reunión del grupo de contacto en favor de la defensa de Ucrania, que reúne a más de 50 países.
En concreto, la OTAN había marcado como una prioridad el acelerar la entrega a Ucrania de defensas antiaéreas, y países como España, Francia, Reino Unido, Alemania, Holanda o Estados Unidos anunciaron en ese sentido nuevas aportaciones en los últimos días.
De fabricación estadounidense, el sistema de misiles HAWK tiene un alcance de 40 kilómetros y se ocupa de la detección, identificación, seguimiento y destrucción de objetivos aéreos a media y baja altura.
Stoltenberg también anunció que la OTAN entregará a Ucrania “cientos” de inhibidores para anular los drones de fabricación rusa e iraní que están causando estragos en los ataques de Rusia contra infraestructuras críticas y contra la población ucraniana.
Alemania ya anunció ayer el envío a Ucrania del primero de los cuatro sistemas de defensa antiaérea Iris-T, mientras que los tres restantes llegarán en 2023.
Estados Unidos dijo hace dos semanas que enviará un nuevo paquete de ayuda militar a Ucrania, por valor de mil 100 millones de dólares, consistente en armas y equipamiento castrense que incluye 18 nuevos Sistemas de Cohetes de Artillería de Alta Movilidad (HIMARS, en inglés), así como cientos de carros blindados, radares y baterías anti-dron.
Sobre las amenazas nucleares rusas, el secretario general dijo que “las circunstancias” en las que la Alianza Atlántica “podría tener que usar armas nucleares son extremadamente remotas”, aunque aseguró que un ataque de este tipo por parte de Rusia “tendrá consecuencias severas”.
Dejó claro que la retórica nuclear del Kremlin es peligrosa e irresponsable y que cualquier uso de armas nucleares por parte de Rusia tendría “graves consecuencias”.
En cualquier caso, la OTAN llevará a cabo la semana que viene su ejercicio anual de disuasión nuclear, que, según reiteró Stoltenberg, estaba planificado antes del inicio de la invasión.
Las maniobras “Steadfast Noon” se realizan cada mes de octubre y suelen incluir vuelos de entrenamiento con aviones de combate de doble capacidad, así como con aviones convencionales respaldados por aviones de vigilancia y reabastecimiento, y no utiliza armas reales.
Los ministros también tomaron la decisión de aumentar las reservas aliadas de municiones y de acelerar la entrega de capacidades, mermadas tras meses de envíos de armas a Ucrania.
Los aliados también acordaron seguir mejorando la resistencia de las infraestructuras submarinas y energéticas críticas y decidieron además crear un grupo de trabajo para asesorar a la industria de la Defensa a la hora de desarrollar sistemas de inteligencia artificial “responsables”, con “controles de calidad y mitigación de riesgos”.
ONU considera las violaciones en Ucrania “una estrategia militar”
Las violaciones y agresiones sexuales atribuidas a las fuerzas rusas en Ucrania constituyen claramente “una estrategia militar” y una “táctica deliberada para deshumanizar a las víctimas”, estima la representante especial de la ONU sobre Violencia Sexual en Conflictos, Pramila Patten.
“Todos los indicios están ahí”, asegura Pramila Patten en una entrevista con la agencia de AFP en París, donde firmó el jueves un acuerdo con la oenegé Bibliotecas sin Fronteras para apoyar a las víctimas de agresiones sexuales durante los conflictos.
“Cuando mujeres y niñas son secuestradas durante días y violadas, cuando se empieza a violar a niños y hombres, cuando vemos una serie de casos de mutilaciones de órganos genitales, cuando escuchamos los testimonios de mujeres hablando de soldados rusos equipados de viagra, se trata claramente de una estrategia militar.
Y cuando las víctimas hablan de lo que se dijo durante las violaciones, está claro que es una táctica deliberada para deshumanizar a las víctimas”
Pramila Patten, representante especial de la ONU sobre Violencia Sexual en Conflictos
Los primeros casos de violaciones y agresiones sexuales surgieron “tres días después del inicio de la invasión de Ucrania”, el pasado 24 de febrero, y desde entonces la ONU verificó “más de un centenar”, pero los denunciados “son sólo la punta del iceberg”, asegura.
“Es muy complicado tener estadísticas fiables durante un conflicto activo y las cifras nunca reflejarán la realidad, ya que la violencia sexual es un crimen silencioso, el menos señalado y el menos condenado”
Pramila Patten, representante especial de la ONU sobre Violencia Sexual en Conflictos
Las víctimas son principalmente mujeres y niñas, indica la responsable de la ONU.
Un informe de fines de septiembre de una comisión de investigación internacional independiente, creada a petición del Consejo de Seguridad, “confirmó crímenes contra la humanidad perpetrados por las fuerzas rusas”, recuerda.
“Según los testimonios recabados, la edad de las víctimas de violencia sexual abarca de los 4 a los 82 años. Hay muchos casos de violencia sexual contra niños, que son violados, torturados y secuestrados”, destaca Pramila Patten.
Desde que Rusia lanzara su invasión de Ucrania el 24 de febrero, más de 7.6 millones de ucranianos buscaron refugio en otros países de Europa.