La guerra entre Rusia y Ucrania llega a su día 247 desde su comienzo el pasado 24 de febrero, cuando el presidente ruso Vladimir Putin ordenó una “operación militar especial” para liberar a la población prorrusa de la región ucraniana de Donbás.
Hoy viernes 28 de octubre la guerra llegó a su día 247, en el que Vladimir Putin descarta ataque nuclear, y hay preocupación sobre el mando en la central nuclear de Zaporiyia, porque se ha pedido que el Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA) vaya a inspeccionar.
Mientras, del lado de Europa quieren reconciliarse con Latinoamérica y Estados Unidos, que sigue de cerca este conflicto porque prometió que Ucrania no se quedará sin la exportación de cereales.
Un grupo de activistas a favor de la legalización de la marihuana colocó el jueves un porro inflable gigante frente a la Embajada de Rusia en Estados Unidos, para pedir la liberación de la baloncestista estadounidense Brittney Griner, presa en ese país por contrabando de droga.
El endurecimiento de la ley rusa sobre la “propaganda LGTB” es “profundamente” preocupante y viola las normas internacionales en materia de derechos humanos, afirmó este viernes el nuevo Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Volker Türk.
Josep Borrell aspira a que Europa y América Latina “relancen” su relación
El alto representante de la UE para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Josep Borrell, dijo el jueves que espera que América Latina y Europa puedan “relanzar” su relación en el encuentro conjunto de ministros de Exteriores de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) y de la Unión Europea (UE), en Buenos Aires, Argentina.
”Espero que estos días relancemos una relación que está basada en sólidas raíces históricas y culturales, pero que tiene que proyectarse al futuro para abordar juntos los desafíos conjuntos que tenemos”
Josep Borrell, alto representante de la UE para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad
Borrell señaló la “complementariedad” entre las dos regiones y la posibilidad de hacer frente a las consecuencias de la guerra en Ucrania, ya que América Latina puede proveer alimentos, energía, en tanto alertó que la crisis financiera puede acabar en una “crisis de deuda”.
Consideró que los niveles de deuda y la posibilidad de “contrabalancearlos” con otra clase de activos y pasivos es algo que los cancilleres podrán “discutir” en la cumbre.
Borrell apostó también por “desbloquear las negociaciones” sobre el acuerdo Mercosur-UE, al considerar que podría ser muy beneficioso para las dos regiones, y que el acuerdo firmado en 2019 era “político” al que no se había acabado de “ultimar en todos sus detalles”. Consideró que ahora el tema ambiental hay que “ponerlo sobre la mesa y aclararlo”.
En el encuentro del jueves no se encuentra Brasil -clave en la preocupación ambiental en el acuerdo Mercosur-UE-, que salió de la Celac en 2020 por decisión del Gobierno de Jair Bolsonaro, que consideró que el grupo apoya a “regímenes no democráticos” como Cuba, Venezuela y Nicaragua.
En su discurso de apertura de la reunión, Borrell insistió que “el objetivo” del encuentro es “renovar” la asociación birregional y que espera que el año que viene se pueda celebrar una cumbre entre UE y América Latina y Caribe “para reforzar este proceso”.
El diplomático llamó a trabajar en cuatro líneas:
- Intensificar el diálogo político al más alto nivel
- Modernizar y culminar la red de acuerdos comerciales y asociación que ya existen
- No perder el tren de la revolución digital, luchar contra la desigualdad, hacer frente al cambio climático
- Colaborar en la promoción de la paz, la democracia y derechos humanos
”La UE es el primer inversor en esta región, hemos invertido en la economía de América Latina, más que en esas otras partes del mundo”, recordó, pero señaló: “somos el tercer socio comercial, China nos ha pasado por delante”.
OIEA tendrá “en unos días” el resultado de la inspección de plantas en Ucrania por “bomba sucia”
Los inspectores de la OIEA tendrán “en unos días” resultados de su análisis en las plantas ucranianas tras las acusaciones de Rusia de que el Gobierno de Kiev preparaba una “bomba sucia” en ellas.
El director de la OIEA, Rafael Grossi, se reunió hoy a puerta cerrada con el Consejo de Seguridad, tras la cual explicó a los periodistas que las inspecciones, que empezarán “en un par de días”, consistirán en la búsqueda de cesio y estroncio en una planta cercana a Kievl donde ya la OIEA estuvo el pasado septiembre descartando entonces todo riesgo nuclear.
Grossi explicó que las acusaciones planteadas ante la OIEA fueron tomadas en serio porque procedían “de un alto oficial ruso”, pero para llevar a cabo las inspecciones tuvo que contactar con el gobierno de Ucrania, del que elogió la apertura y disposición para dejar trabajar a sus inspectores en las plantas operadas por las autoridades de Kiev.
El director del OIEA también insistió ante los miembros del Consejo en la necesidad de crear una zona de seguridad en torno a la central de Zaporiyia -en suelo ucraniano pero ocupada por Rusia desde el principio de la guerra-, algo sobre lo que se dijo “extremadamente preocupado”, y si bien “todo el mundo está de acuerdo con el principio”, su concreción “está llevando demasiado tiempo”.
Justo antes, en la misma tarde del jueves, el Consejo de Seguridad celebró otra reunión, esta vez a puerta abierta, pedida por Moscú, para volver a denunciar un supuesto programa de armas biológicas que asegura que han desarrollado de forma conjunta los Gobiernos ucraniano y estadounidense.
Esa acusación, que Rusia ha llevado en varias ocasiones a la ONU durante los últimos meses, ha sido desmentida una y otra vez por Kiev y Washington, que explican que las instalaciones que señala Moscú no son más que centros para investigar enfermedades.
Naciones Unidas, por su parte, ha confirmado que no hay constancia de ningún programa en Ucrania del tipo que denuncia Rusia.
Washington y sus aliados denunciaron la convocatoria hecha por Rusia como una pérdida de tiempo y como un intento de desinformar a la opinión pública.
El embajador ruso, Vasili Nebenzia, confirmó por su parte que su delegación ha preparado un borrador de resolución que ordenaría una investigación internacional sobre ese supuesto programa de armas biológicas, pero que a priori no tiene visos de contar con los apoyos necesarios.
Preocupa al OIEA “posible confusión” en cadena de mando de Zaporiyia
El director general del OIEA, Rafael Grossi, expresó su “preocupación” por la posibilidad de que se produzca “confusión” en la cadena de mando de la planta nuclear ucraniana de Zaporiyia (ZNPP), controlada por Rusia.
Recordó que Rusia controla la instalación, “incluyendo ahora la toma de decisiones operativas importantes, tras la creación de una organización operativa estatal rusa para el sitio, con sede en Moscú”, mientras que para el OIEA la ZNPP sigue siendo ucraniana.
Rafael Grossi expresó su preocupación por la posible confusión en cuanto a la cadena de mando del funcionamiento de la planta, que podría afectar negativamente a la seguridad nuclear”
El OIEA, que en la ZNPP, la más central atómica más grande de Europa, ha desplegado una misión sobre el terreno conformada por cuatro expertos que vigilan la situación, revela que ya habido ciertos problemas en la coordinación del trabajo.
”Por ejemplo, el personal operativo ucraniano de alto nivel había planeado volver a poner en marcha la unidad 5 del reactor, pero actualmente sigue en modo de parada en caliente ya que los funcionarios rusos no han accedido a ponerla en marcha de nuevo”
Rafael Grossi
La unidad 5 está en parada en caliente para suministrar vapor a las operaciones del lugar, pero el personal de la planta afirma que también será necesario poner otra unidad en parada en caliente para abastecer todas las necesidades del emplazamiento en el futuro.
”La central está esperando el permiso de Moscú para hacerlo”, dice la agencia nuclear de la ONU, que por otra parte informó de que los ingenieros de la central “han estado trabajando para estabilizar el frágil suministro de energía externa de la planta tras los repetidos cortes que se produjeron a principios de este mes”.
Actualmente, como sólo funciona una línea eléctrica externa de 750 kilovatios -frente a las cuatro que había antes de la invasión rusa de Ucrania-, el suministro de energía puede “deteriorarse en cualquier momento”, advirtió Grossi.
No obstante, aunque la seguridad nuclear de Zaporiyia “sigue siendo precaria”, la planta ha recibido directamente y sin interrupción “la energía que necesita para la refrigeración del reactor y otras funciones esenciales de seguridad”, añadió.
El jefe del OIEA insistió en la necesidad de establecer una zona de protección en torno a la ZNPP.
Vladimir Putin descarta un posible ataque nuclear preventivo contra Ucrania u Occidente
El presidente ruso, Vladimir Putin, descartó hoy un posible ataque nuclear preventivo contra Ucrania u Occidente, en respuesta a los presuntos planes del Kremlin de utilizar armas de destrucción masiva en el marco de la actual campaña militar en el país vecino.
”No, no me puedo imaginar en el lugar de (el líder soviético, Nikita) Jruschov. En ningún caso”, dijo Vladimir Putin durante el plenario del club de debate Valdái en la región de Moscú, en alusión a la crisis de los misiles de Cuba, que cumple 60 años.
Precisamente, Vladimir Putin presidió la víspera un ensayo nuclear masivo durante las primeras maniobras de sus fuerzas estratégicas desde el inicio de la intervención militar rusa en Ucrania.
Vladimir Putin recomendó a los occidentales que estudien la doctrina de disuasión nuclear del país, que él mismo aprobó en junio de 2020 y que no contempla un ataque preventivo.
”Que lo lean. Rusia sólo utilizará “armas de destrucción masiva, armas nucleares, para la defensa de su soberanía, integridad territorial y para garantizar la seguridad del pueblo ruso”
Vladimir Putin
Admitió que “mientras existan las armas nucleares, siempre existirá el peligro de su uso”, pero recordó que fue Estados Unidos el único país en agosto de 1945 en utilizar la bomba atómica contra otro Estado no atómico, Japón.
“Nosotros nunca hemos hablado directamente sobre el posible empleo por parte de Rusia de armamento nuclear. Sólo respondimos a las declaraciones realizadas por los líderes de los países occidentales”
Vladimir Putin
El jefe del Kremlin calificó de “sandeces” las acusaciones de que Moscú ataca la central nuclear ucraniana de Zaporiyia, cuando ésta planta está bajo su control desde el comienzo de la “operación militar especial” en febrero.
Y criticó a los inspectores del OIEA que se encuentran en la central por no denunciar de dónde vienen realmente los proyectiles que impactan en las inmediaciones de las instalaciones nucleares.
Vladimir Putin subrayó que para Rusia no tiene sentido “ni político ni militar” utilizar una “bomba sucia” contra Ucrania, a la que acusó de intentar fabricar esa clase de explosivo no atómico, pero con elementos radiactivos.
Además, calificó de “primitivo” el chantaje nuclear de Occidente dirigido a presionar a los países amigos del Kremlin y también a los neutrales para que renuncien a cooperar con el Kremlin.
Durante su intervención en el foro también, Vladimir Putin aseguró que Rusia está dispuesta a dialogar con Estados Unidos sobre estabilidad estratégica.
”Si quieren, estamos dispuestos. Si no quieren, no hace falta. Nosotros desarrollamos nuestro tecnología moderna, incluido armas hipersónicas”
Vladimir Putin
Pronosticó que Estados Unidos, que realizó hoy un ensayo con armas hipersónicas, alcanzará a Rusia en ese ámbito.
”Por ahora no nos han alcanzado y nosotros si las tenemos. Estamos desarrollando esa tecnología. Si alguien quiere hablar con nosotros al respecto, estamos listos”
Vladimir Putin
El secretario de Defensa de Estados Unidos, Lloyd Austin, advirtió el jueves a Vladimir Putin de que la respuesta de la comunidad internacional será “significativa” si Moscú lanza un ataque nuclear.
Austin hizo estas declaraciones durante la presentación de las revisiones de 2022 de la Estrategia de Defensa Nacional, la Postura Nuclear y la Defensa con Misiles de Estados Unidos.
Sobre la postura nuclear, el documento insiste en que “Estados Unidos solo considerará el uso de armas nucleares en circunstancias extremas” para defender sus intereses vitales y los de sus aliados y socios.