La guerra entre Rusia y Ucrania llega a su día 743 desde su comienzo el pasado 24 de febrero de 2022, cuando el presidente ruso Vladimir Putin ordenó una “operación militar especial” para liberar a la población prorrusa de la región ucraniana de Donbás.

Hoy jueves 7 de marzo 2024, Rusia convoca a la embajadora de Estados Unidos por “tentativas de injerencia”, anunció el Ministerio de Exteriores.

Mientras que, el miércoles 6 de marzo, el primer ministro griego, Kyriakos Mitsotakis, denunció un ataque ruso contra Odesa mientras visitaba esta ciudad ucraniana con el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, que provocó explosiones cerca de la comitiva en la que se encontraban ambos mandatarios.

Pese a estos ataques no se registraron personas heridas o muertas de la comitiva del primer ministro griego, sin embargo reportan la muerte de cinco personas por este ataque.

Luego de este ataque, Kyriakos Mitsotakis, animó en Bucarest a sus socios en la OTAN a seguir el ejemplo de Grecia y aumentar sus presupuestos en defensa ante las amenazas de Rusia contra Europa.

Vladimir Putin se muestra dispuesto a garantizar la seguridad nuclear en reunión con Grossi

El presidente ruso, Vladimir Putin, se mostró el miércoles dispuesto a garantizar la seguridad nuclear al recibir a Rafael Grossi, director general del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA).

“Nosotros, por supuesto, estamos dispuestos a hacer todo lo posible para garantizar la seguridad en cualquier punto en el que de alguna manera estemos relacionados con la energía nuclear”

Vladimir Putin al comienzo de la reunión en el balneario de Sochi (mar Negro)

Putin reconoció que la agenda de Grossi incluye varios asuntos “especialmente sensibles”, en clara alusión a la central de Zaporiyia, bajo control ruso en territorio ucraniano.

Asimismo, se mostró dispuesto a abordar con el jefe del OIEAcualquier tema”, al tiempo que alabó al argentino por los pasos que ha dado para reforzar la cooperación con Rusia.

A su vez, recordó que Rusia es uno de los líderes en la esfera nuclear, que recordó es una energía limpia, y subrayó que Moscú hace todo lo posible para “incrementar la seguridad de las instalaciones atómicas”.

“Estamos dispuestos a compartir nuestros avances con todos los socios interesados”, agregó durante el encuentro que tuvo lugar en presencia del jefe de la agencia atómica rusa, Rosatom, Alexéi Lijachov.

Grossi consideró “extremadamente importante” la reunión y recordó que el último encuentro con el líder ruso tuvo lugar hace 18 meses en San Petersburgo.

“Me parece que todo lo que ha sucedido desde entonces demuestra aún más lo oportuna que es esta reunión (...) Hay desafíos y asuntos delicados”, dijo.

Además, también destacó la larga conversación que mantuvo esta mañana con Lijachov en presencia de especialistas del OIEA y de Rosatom, que estuvo centrada principalmente en minimizar los riesgos para la planta de Zaporiyia, la mayor de Europa.

“La situación en Zaporiyia sigue siendo muy precaria”, aseguró Grossi este lunes durante un discurso ante la Junta de Gobernadores de esta agencia de Naciones Unidas.

En un encuentro posterior con los medios, Grossi dijo que el personal que el OIEA tiene desplegado en la planta ha informado de que el pasado fin de semana aumentó la actividad militar en sus inmediaciones, lo que significa, dijo, que “la integridad física de la instalación sigue estando en riesgo”.

Las tropas rusas han intensificado en las últimas semanas su ofensiva para recuperar el terreno perdido en el norte de la región sureña de Zaporiyia, cuya capital está bajo control ucraniano.

La última visita de Grossi a Rusia para abordar la situación en la central de Zaporiyia tuvo lugar hace un año.

Vladimir Putin

Volodímir Zelenski pide más defensas tras el ataque ruso junto al convoy del primer ministro griego

El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, insistió en su discurso a la nación del miércoles por la noche en la necesidad de que su país reciba sistemas adicionales de defensa aérea para protegerse de ataques como el que horas antes provocó explosiones cerca del convoy en el que viajaba junto al primer ministro griego, Kyriakos Mitsotakis.

Zelenski y Mitsotakis visitaban juntos el puerto de Odesa, en el sur de Ucrania, cuando un ataque ruso contra la infraestructura portuaria en el que se habría utilizado un misil causó explosiones cerca de la comitiva de ambos mandatarios. Según declaró una fuente de la Armada ucraniana a medios locales, cinco personas murieron en ese ataque.

“El mundo tiene suficientes sistemas de defensa aérea y capacidades para producir armas para defensa”, dijo Zelenski, que añadió que estas “armas se necesitan aquí (en referencia a Ucrania) para salvar vidas”.

El jefe del Estado ucraniano señaló que “las decisiones” sobre el envío de este material militar “se necesitan ahora, no algún día”, para poder ofrecer seguridad “a la gente que soporta ataques terroristas día y noche”, en referencia a los últimos ataques rusos contra centros urbanos como Odesa.

Doce personas, entre ellas cinco niños, murieron el pasado fin de semana en un ataque ruso con drones kamikaze iraníes Shahed que impactó en un edificio residencial. Odesa volvió a ser atacada en la madrugada del martes al miércoles con una veintena de drones.

Antes de pedir a sus aliados que envíen lo antes posible más medios de defensa antiaérea, Zelenski y Mitsotakis contaron en una rueda de prensa conjunta cómo vivieron el momento de la explosión. El primer ministro griego dijo estar conmocionado por lo ocurrido, mientras que Zelenski acusó a Rusia de atacar a civiles.

Según una televisión privada griega, la explosión se produjo a menos de doscientos metros de la comitiva en la que viajaban ambos dirigentes.

Volodímir Zelenski pide más defensas tras el ataque ruso junto al convoy del primer ministro griego

Rusia convoca a la embajadora de Estados Unidos por “tentativas de injerencia”, anunció el Ministerio de Exteriores

Rusia convocó este jueves a la embajadora de Estados Unidos Lynne Tracy, para denunciar lo que Moscú considera “tentativas de injerencia” de oenegés estadounidenses en sus asuntos internos, una semana antes de que se celebren elecciones presidenciales.

Durante la reunión con la representante, “se subrayó especialmente que las tentativas de injerencia en los asuntos internos de Rusia [...] serán reprimidas firmemente”, señaló el Ministerio ruso de Relaciones Exteriores en un comunicado.

El gobierno ruso acusa a tres oenegés estadounidenses especializadas en educación de “poner en marcha programas y proyectos de orientación antirrusa con el apoyo de la embajada” y de intentarcontratar a agentes de influencia con el pretexto de intercambios educativos y culturales”.

Esas tres oenegés fueron declaradas “indeseables” en Rusia, según el ministerio.

“Se entregó una nota oficial a la embajadora, pidiéndole que cesara toda asistencia a las actividades de esas oenegés”, acusadas de “promover actitudes y valores ajenos a la sociedad rusa”, indicó la institución.

Moscú también advirtió a Tracy que se debería evitar cualquier “acción subversiva” y la “difusión de desinformación” antes de las presidenciales del 15 al 17 de marzo, en las que Vladimir Putin probablemente será reelegido. El presidente ruso se presenta a esos comicios en ausencia de una oposición real.

El ministerio amenazó con expulsar a los empleados de la embajada estadounidense si estos estuvieran “implicados en tales acciones”.

Serguei Lavrov