La guerra entre Rusia y Ucrania llega a su día 845 desde su comienzo el pasado 24 de febrero de 2022, cuando el presidente ruso Vladimir Putin ordenó una “operación militar especial” para liberar a la población prorrusa de la región ucraniana de Donbás.
Hoy lunes 17 de junio 2024, Ucrania cierra la cumbre de Suiza con la mayoría del apoyo Occidental.
Más de 80 naciones fueron invitadas a la Cumbre por la Paz de Ucrania en Suiza, las diferencias de pensamiento sobre el cómo debe de terminar la guerra fueron variadas, los países Latinoamericanos también participaron en esta reunión.
Como resultado se firmó una declaración conjunta que reclama seguridad nuclear y de tránsito marítimo, aunque doce países destacados del mundo en desarrollo y socios de Rusia en ciertos foros, declinaron firmar el documento.
Entre estos se encuentran Brasil, India y Sudáfrica - que forman parte junto a Rusia China del grupo de economías emergentes, conocidos como los BRICS-, además de México.
Tampoco se unieron a la declaración final Armenia, Baréin, Indonesia, Libia, Arabia Saudí, Tailandia y Emiratos Árabes Unidos, mientras que 84 países sí suscribieron el documento, incluidos los países de la Unión Europea, Estados Unidos, Japón, Argentina, Chile y Ecuador.
Volodímir Zelenski afirma que Rusia no está dispuesta a una “paz justa” y pide ayuda a China
Rusia y sus dirigentes “no están listos para una paz justa”, declaró el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski el domingo, tras una cumbre para la paz celebrada en Suiza.
“Debemos hacer nuestro trabajo, no pensemos en Rusia, hagamos lo que tenemos que hacer. De momento, Rusia y sus dirigentes no están listos para una paz justa. Es un hecho”
Volodímir Zelenski en una rueda de prensa en Burgenstock
Rusia puede negociar la paz “mañana si se retira de nuestro territorio”, insistió Zelenski, después de que el presidente ruso, Vladimir Putin, se declarase abierto a dialogar.
Sin embargo, Putin planteó unas condiciones que Kiev considera inaceptables, que equivaldrían a una rendición y a abandonar territorios reconocidos como parte de Ucrania por la comunidad internacional.
Zelenski afirmó además que Ucrania no era “enemiga” de China, respondiendo a una pregunta sobre sus relaciones con Pekín.
China es un país aliado de Rusia y ha sido acusada de contribuir al esfuerzo bélico de Moscú, suministrando componentes. Pekín decidió no participar en la cumbre sobre la paz de este fin de semana porque Rusia estaría ausente.
“China podría ayudarnos”
Volodímir Zelenski en una rueda de prensa en Burgenstock
Aún así, a pesar de que Estados Unidos reanudó el envío de ayuda, bloqueado durante meses, y de que otros aliados occidentales se comprometieron a reforzar su cooperación, Volodimir Zelenski consideró que el volumen actual de ayuda aportada no bastará para ganar la guerra.
“Hay ayuda. Hay paquetes importantes. ¿Basta eso para ganar? No. ¿Llega tarde? Sí”, señaló Zelenski.
Resultado de la Cumbre de Paz en Suiza fue “casi nulo”, según el Kremlin
El Kremlin aseguró hoy que el resultado de la Cumbre de Paz para Ucrania celebrada el fin de semana en Suiza fue “casi nulo”, aunque el documento final fue firmado por países teóricamente amigos de Rusia, como Hungría, Turquía y Serbia.
“Por supuesto, si hablamos en general del resultado de esta reunión, entonces, claro está, es casi nulo”
Dmitri Peskov, portavoz presidencial, durante su rueda de prensa telefónica diaria
Peskov destacó que “muchos” de los países que acudieron a la cumbre aseguraron que “cualquier discusión seria y sustancial” carece de sentido sin la presencia de Rusia.
“Esto también lo hemos observado”, afirmó.
En cuanto a una futura participación rusa en una cumbre para el arreglo del conflicto, aseguró que la postura rusa es “clara” y es la que fue expuesta el viernes por el jefe del Kremlin, Vladimir Putin.
“Sigue en la agenda del día la iniciativa de paz que expuso a finales de la pasada semana el presidente Putin”
Dmitri Peskov, portavoz presidencial, durante su rueda de prensa telefónica diaria
Putin presentó el viernes sus condiciones para la paz en Ucrania, cuyas tropas deben abandonar las cuatro regiones anexionadas por Moscú en 2022; reconocer esas regiones y la península de Crimea como territorio ruso; y renunciar a sus planes a ingresar en la OTAN.
En caso de que Kiev acepte dichas condiciones, Putin ordenaría inmediatamente el cese de las acciones militares y el inicio de negociaciones de paz.
Además, dicha iniciativa debe contemplar el levantamiento de todas las sanciones occidentales adoptadas contra Rusia.
“Continuaremos trabajando con todos los países que estén dispuestos a ello. Es la postura de nuestro presidente, él sigue abierto al diálogo”
Dmitri Peskov, portavoz presidencial, durante su rueda de prensa telefónica diaria
En cuanto a la postura de algunos países amigos de Moscú que firmaron la declaración final en Suiza, aseguró que el Kremlin ha tomado nota y que seguirá explicándoles sus argumentos.
“No, no las estropeará”, dijo en respuesta a si el hecho de que firmaran la declaración puede repercutir en las relaciones con esos países.
El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, y los principales lideres occidentales rechazaron la propuesta de Putin, al considerar que supone la rendición de Ucrania.
Ucrania cierra la cumbre de Suiza con la mayoría del apoyo Occidental
La Cumbre de Paz para Ucrania celebrada en Suiza, que presentaba como a la gran ausente a Rusia, finalizó el domingo con un triunfo diplomático para el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, quien logró que el apoyo a su causa no fuera solo europeo, sino global, a pesar de algunas discrepancias.
Junto a los líderes de la UE y de la OTAN, habituales aliados de Zelenski en grandes reuniones, en esta ocasión también hubo presidentes y jefes de Estado de países latinoamericanos, africanos y asiáticos, algo que el líder ucraniano deseaba para mostrar que la guerra contra Rusia no es sólo un problema continental.
“Hemos contado con la participación de presidentes y representantes a distintos niveles de 101 países y organizaciones, es un éxito, y Rusia hizo todo lo que pudo para que algunos no vinieran, pero les agradezco que hayan mostrado su independencia”
Volodímir Zelenski, en una rueda de prensa al finalizar la cumbre
Simbólico fue que en la comparecencia final no sólo se presentaron ante los cientos de periodistas el presidente Zelenski, su homóloga suiza Viola Amherd como anfitriona o la de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen, sino también figuras como el presidente chileno Gabriel Boric o el ghanés Nana Akufo-Addo.
En los plenarios del sábado y domingo, que Zelenski reconoció que quiso que se emitieran en directo y no fueran a puerta cerrada para que “el mundo viera el apoyo global”, también participaron el presidente argentino Javier Milei o el ecuatoriano Daniel Noboa, parte de los más 60 jefes de Estado y gobierno que tomaron parte en la cumbre.
Von der Leyen, quien reconoció que la cumbre “no fue una negociación de paz porque Putin no está seriamente considerando el fin de la guerra”, afirmó que “el alto nivel de participantes en ella muestra que el mundo se preocupa profundamente por la guerra”.
En el encuentro de líderes, uno de los mayores de las últimas décadas con carácter extraordinario (fuera de reuniones periódicas anuales como las del G20 o la Asamblea de Naciones Unidas) se buscó discutir los efectos de la guerra ucraniana para el resto del mundo, incluso en regiones geográficamente lejanas.
Fue por ello que los líderes se repartieron este domingo en distintas mesas que discutieron la seguridad nuclear y la inseguridad alimentaria que situaciones como el bloqueo del Mar Negro han traído a los países en desarrollo, o la dimensión humanitaria de los prisioneros de guerra y los niños atraídos por Rusia desde las partes de Ucrania que controla.
La declaración final lograda tras la cumbre destacó precisamente la necesidad de atender esas amenazas, aunque en un tono relativamente moderado, ya que ni siquiera se refirió a Rusia como una fuerza agresora.
Pese a ello, no se logró que 12 países que participaron en la cumbre (con delegaciones de bajo nivel en lugar de sus jefes de Estado) firmaran el documento, entre ellos destacadas líderes regionales como Brasil, Arabia Saudí, India, Indonesia, México o Sudáfrica.
Esto -sumado a la ausencia de China, que en el pasado ha presentado sus propias propuestas de paz para Ucrania, o la cancelación de último minuto de la presencia del presidente colombiano Gustavo Petro- indica que el apoyo a Ucrania aún no es del todo compacto a nivel global.
“Han de respetarse todas las opiniones”, se limitó a señalar Zelenski ante la decisión de algunos países de no suscribir la declaración conjunta.