Jill Biden, la esposa del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, presumió la ofrenda del Día de Muertos que se colocó en La Casa Blanca.
Desde redes sociales, Jill Biden compartió que La Casa Blanca se unió a la celebración del Día de Muertos con la colocación de una ofrenda con comida y otros elementos típicos.
En la ofrenda que presumió Jill Biden, se observa un altar donde se incluyó una Virgen de Guadalupe y varios elementos de la cultura mexicana como el papel picado, cráneos decorados y pan de muerto.
La esposa de Joe Biden aseguró que el gobierno de Estados Unidos se unió a las familias de todo el país para celebrar y honrar la vida de “los seres queridos que han fallecido”.
“¡Feliz Día de los Muertos desde The White House! Hoy, nos unimos a las familias de todo el país para honrar y celebrar la vida de los seres queridos que han fallecido”
Jill Biden, esposa de Joe Biden
Gobierno de Joe Biden celebra Día de Muertos con ofrenda
El gobierno de Joe Biden celebró el Día de Muertos con una ofrenda que colocó en La Casa Blanca el 1 y 2 de noviembre.
Desde la cuenta oficial de La Casa Blanca, reconocieron que Jill y Joe Biden reconocieron la celebración mexicana con la primera ofrenda que se coloca en la casa de gobierno del Estados Unidos.
La ofrenda constó de un altar con cráneos decorados tradicionalmente que también fungieron de floreros .
También se colocaron veladoras decoradas con cráneos y con estampas del Sagrado Corazón; así como
- Pan de muerto
- Fruta
- Juegos típicos mexicanos como La Lotería
- Bolsas
- Flores
Además, se colocó un cuadro de la Virgen de Guadalupe, rodeada de 4 cuadros de arcángeles, acompañada de flores de cempasúchil de papel y papel picado.
La ofrenda del Día de Muertos se quita el 3 de noviembre
La ofrenda del Día de Muertos, que se inicia el 28 de octubre con la colocación de una vela y concluye el 2 de noviembre, con la colocación de la comida favorita de los familiares que se recuerdan, debe retirarse el 3 de noviembre.
Esto debido a que es el 2 de noviembre el último día en el que las almas pueden visitar a sus familias y acudir a las ofrendas que se colocan en su honor.
La ofrenda se empieza a colocar desde el 28 de octubre con una vela; luego, se coloca un vaso de agua y al día siguiente se coloca un pan. Estos elementos son para aquellos que murieron de manera repentina y pequeños no bautizados.
La ofrenda se sigue complementando para que el 1 de noviembre se conmemore a los que murieron durante su infancia y, finalmente, el 2 de noviembre llegan aquellos que murieron adultos.