Una tenebrosa amenaza fue la que hizo Juan Ramón de la Fuente durante una reunión que presidió este lunes 27 de noviembre en la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
El embajador de México ante la ONU, Juan Ramón de la Fuente, encabezó la Segunda Reunión de los Estados que forman parte del Tratado de Prohibición de Armas Nucleares.
Durante el encuentro, el ex rector de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) hizo una tenebrosa amenaza sobre lo que consideró, podría ocurrirle al mundo en un futuro.
¿Cuál fue la tenebrosa amenaza de Juan Ramón de la Fuente?
Al presidir la Segunda Reunión de Estados firmante del Tratado de Prohibición de Armas Nucleares, Juan Ramón de la Fuente hizo una tenebrosa amenaza de lo que podría ocurrir.
Y es que el embajador de México ante la ONU advirtió que la posibilidad de que se registre una catástrofe nuclear no solo es real, sino que expuso, cada vez es más palpable.
Lo anterior debido a que Juan Ramón de la Fuente expuso que las tensiones alrededor del mundo van a la alza, mientras el gasto militar de arsenales nucleares también sigue creciendo.
“El riesgo de una catástrofe nuclear es real y va en aumento (...) Las tensiones geopolíticas crecen a la par del gasto militar y de la modernización de los arsenales nucleares”
Juan Ramón de la Fuente
En ese sentido, Juan Ramón de la Fuente dijo que el riesgo del uso intencional o accidental de las armas nucleares, en la actualidad está más presente que nunca en la historia.
Juan Ramón de la Fuente pide no guardar silencio ante riesgo de catástrofe nuclear
Al lanzar la tenebrosa amenaza sobre la posibilidad de una catástrofe nuclear, Juan Ramón de la Fuente hizo un llamado para no guardar silencio ante el riesgo que existe.
En su mensaje, Juan Ramón de la Fuente refirió que para todos debe ser inaceptable guardar silencio ante quienes, acusó, están a favor de la conservación de armas nucleares.
Asimismo, el embajador lamentó que no se hayan dado avances tangibles en el desarme nuclear, por lo que instó a que se eleve el tono y el contenido de las exigencias.
Sobre ello, insistió en que no hay “lugar para el silencio ni para la pasividad”, pues apuntó que cada vez se sabe más sobre las consecuencias catastróficas de un desastre nuclear.
Al finalizar su mensaje, aseguró que las armas nucleares no solo no garantizan la seguridad internacional, sino que ponen en peligro real la supervivencia de la humanidad”.