Margarita de Dinamarca- de 84 años de edad- se cayó y su hijo Federico de Dinamarca no ha ido ni a verla al hospital.
El país Europeo ha vuelto a protagonizar una polémica tras la aparatosa caída de la reina Margarita de Dinamarca.
Federico de Dinamarca ha iniciado un viaje privado a solo unos días después de que su madre se haya fracturado la mano izquierda.
La reina Margarita de Dinamarca fue hospitalizada después de una caída en el castillo de Fredensborg.
Margarita de Dinamarca fue hospitalizada por caída y su hijo no ha ido a verla
Margarita de Dinamarca, que fue noticia a principios del 2024 al convertirse en la primera monarca danesa en abdicar, fue hospitalizada después de una caída.
Fue ingresada en el hospital de Copenhague el miércoles 18 de septiembre para observación después del incidente en el castillo de Fredensborg.
Jefa de comunicaciones de la casa real danesa, confirmó la noticia.
Afirmando: “Según las circunstancias, la reina está bien, pero fue admitida para observación por el momento”.
Sin embargo, la nueva polémica viene de su hijo Federico de Dinamarca, quien se fue de viaje dejando a su madre convaleciente.
Federico de Dinamarca se encuentra en un viaje privado y apuntan que se fue de vacaciones y no se sabe ni dónde está ni con quién.
No haber interrumpido esa misteriosa ausencia en su agenda habría provocado controversia en el país.
Pues, no es la primera vez que se le hacen críticas por irse de vacaciones en un momento inconveniente.
La polémica no sólo se ha formado porque Margarita de Dinamarca se encuentre de baja, sino por lo que supone institucionalmente.
Cuando el rey abandona el país por unos días, es la reina quien ejerce como regente, algo que no puede hacer actualmente al encontrarse en este estado.
Margarita de Dinamarca recibe el alta médica tras caída
Margarita de Dinamarca fue dada de alta tras sufrir una caída en el castillo de Fredensborg.
Le provocó “lesiones en las vértebras del cuello y una fractura en la mano izquierda”, según informó el palacio el viernes.
La información viene después de que medios apuntaran que su hijo Federico de Dinamarca no la fue a ver ni al hospital.
La reina tiene la mano izquierda enyesada y deberá llevar un cuello ortopédico rígido durante los próximos meses, según el mismo comunicado.
