Un niño de 6 años murió por exceso de ejercicio; su padre lo obligaba a correr porque le decía que estaba “gordo” y ahora el señor enfrenta cargos por homicidio.
El caso ocurrió en Nueva Jersey, Estados Unidos, en 2021, cuando el menor Corey Micciolo fue sometido a correr a gran velocidad durante horas, lo que le causó daños en su organismo al punto de provocarle la muerte.
El padre, identificado como Christopher Gregor, de 31 años, enfrenta cargos por homicidio por su responsabilidad al ejercer “violencia crónica” sobre el niño de 6 años.
Niño de 6 años muere tras correr durante horas; esto le pasó
De acuerdo con medios locales, el niño de 6 años corrió en una caminadora durante varias horas a gran velocidad, lo que ocasionó que su cuerpo sufriera contusiones cardíacas.
El daño que presentó fue en corazón y pulmones, pues ambos órganos sufrieron laceraciones; el diagnóstico fue “lesiones por objeto contundente con contusiones cardíacas y hepáticas con inflamación aguda”.
El menor fue obligado a correr en la caminadora a pesar de que se cayó varias veces; su padre lo obligó a seguir e incluso le mordía la cabeza para que no se detuviera, ya que alegaba que estaba “gordo”.
Diez días después de ello, el niño terminó en el hospital y contó al médico lo que le hacía su papá; posteriormente murió por las lesiones.
En redes sociales se difundió un video que captó el excesivo entrenamiento al que fue sometido el niño de 6 años.
Padre del niño de 6 años está detenido desde 2022 y enfrenta cargos por homicidio
Por la muerte del niño de 6 años, el padre fue detenido desde 2022 y enfrenta un juicio por homicidio, ya que una investigación en 2021 y tras la autopsia al niño de 6 años determinó que sufría “violencia crónica”.
A pesar de enfrentar dichos cargos, el padre rechazó el trato para reducir su sentencia a 30 años de cárcel, por lo que permanece recluido en la prisión de Ocean City sin derecho a fianza.
La madre del niño de 6 años, Bre Micciolo, presentó una demanda contra servicios sociales por la negligencia en el caso del menor, ya que ella había denunciado los abusos del padre desde 20 meses antes.
Ya que la mujer se percató que el niño presentaba golpes en el rostro y cuerpo; a pesar de presentar su denuncia y solicitar una investigación, los servicios periciales le negaron la custodia a la madre y descartaron que el menor estuviera en riesgo.