El pasado fin de semana, un niño -de 7 años de edad- murió aplastado entre las puertas de un elevador.
El accidente ocurrió en una casa de playa en Carolina del Norte, Estados Unidos, cuando el niño quería regresar a la habitación que compartía con su familia.
De acuerdo con los informes de la policía local, el niño fue aplastado por las puertas del elevador luego de que su cuello quedara atorado.
Niño murió aplastado entre las puertas del elevador
El sábado 10 de julio por la noche, en el primer día de vacaciones de la familia, el niño quedó atrapado entre la cabina del elevador y el marco de una puerta de la casa de playa.
El cuello del niño fue aplastado un par de veces hasta que el sistema del elevador se detuvo y emitió una alarma por fallas.
Cuando la familia se percató del incidente, el niño ya no mostraba signos vitales.
Rich Shortway, jefe de bomberos en Corolla, Carolina del Norte, afirmó que paramédicos intentaron reanimar al niño.
Sin embargo, el menor de 7 años murió durante los movimientos del elevador debido a que su cuello quedó aplastado.
Muerte de niños en elevadores son “accidentes comunes”, lamentan
Equipo de The Washington Post hizo una investigación acerca del niño que murió aplastado entre las puertas del elevador.
Al respecto, lamentaron que este tipo de accidentes “sea bastante común” en varios estados del país.
Hace un par de meses, un regulador federal de seguridad presentó una demanda contra un fabricante de elevadores por “ser responsable de al menos 8 muertes de niños” durante los últimos 40 años.
No obstante, los fabricantes de esta industria argumentaron que “es un problema complejo del cual no deben hacerse cargo”.
Mientras tanto, la muerte de niños por la falta de seguridad en los elevadores continúa con numerosas incidencias en Estados Unidos.
Con información de The Washington Post