El Papa Francisco dice como sugerencia que la vacunación contra Covid-19 es una obligación moral.
Esto tras un discurso ante embajadores acreditados por la Santa Sede, en un acto anual para que el Vaticano informe sus objetivos de política exterior de este 2022.
Anteriormente, el Papa Francisco había evitado hablar del tema de la vacunación como una obligación moral.
Antes lo había considerado como un ‘acto de amor’. Mientras que para las personas que no querían recibir la vacuna era un ‘acto de odio’.
Pero este lunes el Papa Francisco, cambio de opinión, ya que dijo que las personas que tenían la responsabilidad de cuidar de si mismas
“Esto se traduce en respeto por la salud de los que nos rodean. Cuidar la salud es una obligación moral”
Papa Francisco
El Papa Francisco argumenta que hay divisiones ideológicas que cambian la opinión sobre vacunarse
El Papa Francisco argumenta que hay divisiones ideológicas que cambian la opinión de las personas sobre las ventajas de vacunarse.
Comentó que a menudo la gente se deja influenciar por la ideología del momento, y que esta ideología es reforzada por información sin base o hechos poco documentados.
Por esto pidió “una terapia de realidad”, para “corregir esa distorsión de la raza humana”.
Las vacunas no son medios mágicos: Papa Francisco
Aunque, el Papa Francisco dijo que las vacunas no son remedios mágicos de curación, pero que sin duda representan, junto con otros tratamientos la solución más razonable para la prevención de la enfermedad del Covid-19.
A pesar de que algunos católicos y obispos estadunidenses antivacunas han afirmado que hay vacunas basadas en investigaciones realizadas con fetos abortados, por lo que son ‘inmorales’.
Sin embargo, la oficina de doctrina del Vaticano ha afirmado que es correcto que los creyentes utilicen vacunas que puedan haber utilizado células de fetos abortados.
En tanto el Papa Francisco fue inmunizado con la vacuna de Pfizer.
Las vacunas deben de ser de acceso universal: Papa Francisco
En su discurso el Papa Francisco insistió que las vacunas deben de ser de acceso universal, especialmente en partes del mundo con bajas tasas de vacunación.
Por lo que pidió revisar las normas de las patentes para que los países más pobres pudiesen desarrollar sus propias vacunas.
También dijo que instituciones como la Organización Mundial del Comercio y la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual adapten sus instrumentos legales.
Para que las normas monopolísticas, no se conviertan en obstáculos para producción de vacunas.