Psephurus gladius mejor conocido como el pez remo chino o el pez espátula del Yangtsé, ha sido declarado oficialmente extinto, convirtiéndose así en el primer animal extinto del 2020. "El rey del agua dulce", como también era conocido, habitaba las aguas del Río Yangtsé, el tercero más largo del mundo.
En los últimos 17 años no se ha encontrado ningún ejemplar con vida del pez remo chino o espátula del Yangtsé por lo que ha sido declarado extinto, esto de acuerdo a la Lista Roja de especies en peligro de extinción de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN).
Se le consideró como uno de los peces de agua dulce más grandes del mundo pues llegaba a medir alrededor de tres metros aunque hay registros de un ejemplar que midió casi siete metros de largo.
{username} (@translatorbali) January 5, 2020
En 2003 fue cuando se le vio por última vez al pez espátula del Yangtsé cuando fue capturado por accidente, sin embargo, pudo ser rescatado por Investigadores de la Academia China de Ciencias de la Pesca y devuelto al río Yangtsé.
La pesca abusiva y la construcción de presas propiciaron la extinción del pez
El pez remo sobrevivió durante los últimos 200 años apróximadamente y sus células eran capaces de detectar la actividad eléctrica en otros animales, lo cual le permitía cazar pequeños crustáceos.
Sin embargo, el pez remo chino se pescó hasta su extinción y sin ninguna regularización aún cuando desde 1996 se encontraba en la lista de ‘especies en peligro de extinción y en 2009 se le clasificó ‘en peligro crítico’.
{username} (@LaVanguardia) January 8, 2020
La pesca abusiva de este espécimen comenzó en la década de los 70 y, para 1980 su condición se agravó con la construcción de la presa Gezhouba impidiendo migrar naturalmente. Para 2003 se construyó otra presa llamada Tres Gargantas lo que terminó por extinguir a la especie del pez espátula chino pues no pudieron hallar sitios donde incubar.
El río Yangtsé posee alrededor de 70 animales clasificados como especies en protección nacional e internacional pero, a pesar de ello a las orillas del río se ubican las ciudades responsables de producir el 40 por ciento producto interno bruto de China, lo que trae contaminantes al río que posee alrededor de seis mil 300 kilómetros de largo.