En Arizona, Estados Unidos, un agente de policía persiguió a un adolescente de 17 años después de intentar detenerlo por ir en bicicleta sin luz delantera. Durante la persecución, el joven dejó caer una pistola y al intentar recogerla, el uniformado le disparó dos veces por la espalda.
El hecho ocurrió el pasado 2 de enero, cuando el oficial Chase Bebak-Miller, de la Policía de Chandler, vio que un adolescente, de nombre Anthony Cano, circulaba en bicicleta sin luz delantera. El agente activó la sirena, después de que el menor comenzara a circular por dos carriles.
Familia del adolescente pide transparencia
Más de una semana después de que los amigos y la familia de Cano se reunieran frente al Ayuntamiento para pedir una mayor transparencia en la investigación del caso, fue publicado un video de cinco minutos de la persecución, donde se muestra el momento en el que el joven adolescente deja la bicicleta y corre hacia un parque cercano.
El policía Bebak-Miller persigue a pie al adolescente y le grita que se detenga, segundos antes de ver cómo el joven deja caer un arma y estira el brazo para recogerla. "¡Arma desenfundada! ¡Al suelo!", grita el policía menos de un segundo antes de disparar contra Cano, quien cayó derribado tras recibir una primera bala en la espalda, un segundo después, el oficial vuelve a disparar mientras el joven permanece boca abajo.
En el video se escucha cómo el policía le dice al adolescente que coloque las manos en la espalda, a lo que Cano responde: "Lo siento, señor. No puedo". Finalmente, el oficial le dice "Oye, quiero ayudarte, ¿de acuerdo?".
Policías practicaron primeros auxilios al adolescente
Cuando otros policías llegan al lugar, el adolescente les pide que se apresuren. Incluso se puede escuchar a Anthony Cano decir "no quiero morir", mientras los oficiales le esposan las manos.
Para evitar una hemorragia, los policías le practican primeros auxilios, mientras el adolescente asegura que estaba tratando de tirar el arma. Cano fue trasladado a un hospital, donde murió a causa de sus heridas el 23 de enero.
Por su parte, la madre del adolescente, Renee Clum, cuestionó a las autoridades de Arizona la detención de su hijo. La mujer comentó para el medio ‘ The Arizona Republic’ que su hijo estaba asustado e intentado volver a casa. “No estaba haciendo nada malo más que montar en bicicleta sin luz", añadió la mujer.
En una perfil de Facebook, Clum escribió sobre su hijo: ‘Anthony Cano era un niño inteligente de 17 años que intentaba descubrir su propósito en la vida, como todos los adolescentes. Asistió al estudio bíblico los miércoles, sin que su madre le pidiera que fuera".
"El 2 de enero de 2021, Chandler PD no sacó a un chico malo de las calles, el vecindario de Galveston no se hizo más seguro con la remoción de un criminal, no era un pandillero, ni siquiera tenía un tatuaje”, finalizó.