La Administración de Control de Drogas de Estados Unidos (DEA por sus siglas en inglés) ofreció una recompensa de más de 900 millones de pesos por Caro Quintero y “el Mayo” Zambada.
Así como por información que lleve a la captura de otros líderes del cártel de Sinaloa con una campaña lanzada en la frontera de México con Estados Unidos para lograr la detención de:
- Rafael “Rafa” Caro Quintero
- Ismael “El Mayo” Zambada García
- Iván Archivaldo Guzmán Salazar
- Ismael “Mayito Flaco” Zambada
- Jesús Alfredo Guzmán Salazar
- Alfonso Limón Sánchez
- Alfonso Arzate García
Hasta 900 mdp por la captura de líderes del Cártel de Sinaloa
Agentes de la DEA colocaron varios pósters donde solicitan información que lleve a la captura de líderes del cártel de Sinaloa que han sido buscados por autoridades mexicanas y estadounidenses por décadas.
El cartel de la agencia antidrogas pide el apoyo de la ciudadanía y ofrece un total de más de 900 millones de pesos por información.
Las recompensas se distribuyen de la siguiente manera:
- Caro Quintero: recompensa de 20 millones de dólares, es decir, 406 millones 820 mil pesos
- “el Mayo” Zambada: recompensa de 15 millones de dólares, es decir, 305 millones 115 mil pesos
Además, se ofrecen 5 millones de dólares, aproximadamente 101 millones 705 mil pesos, por los hijos de “El Chapo” Guzmán, Iván Archivaldo y Jesus Alfredo, cada uno, sumando poco más de los 900 millones de pesos en recompensas.
De acuerdo con el ex jefe de Operaciones Internacionales de la DEA, la agencia no cesa las campañas de localización de los principales líderes del narcotráfico sin importar el tiempo que haya pasado.
¿Por qué se ofrece recompensa por “el Mayo” Zambada y Caro Quintero?
Ismael “el Mayo” Zambada es uno de los líderes criminales del Cártel de Sinaloa que no ha podido ser detenido ni una sola vez.
Esto a pesar de que se sabe que se dedica al narcotráfico desde hace 45 años, por lo que, en aras de su localización, se ofreció 15 millones de dólares.
Por otra parte, Rafael Caro Quintero es buscado por el asesinato de Enrique Camarena en 1985.
Este líder fue liberado en 2013 de una cárcel mexicana luego de permanecer recluido por 28 años; sin embargo, no ha sido presentado ante la justicia de Estados Unidos.
En 2015, un tribunal federal ordenó su reaprehensión, pues fue liberado con antelación y no cumplió la sentencia de 40 años.
Además, en 2021, se avaló su extradición a Estados Unidos pese a que se encuentra prófugo de la justicia.