El presidente de Rusia, Vladimir Putin, prepara lo que se ha interpretado como una advertencia del “día del juicio final” dirigida a Estados Unidos y Occidente.
Lo anterior en el marco de la realización el próximo 9 de mayo del desfile militar con motivo del “día de la victoria”, en el que Rusia conmemora el triunfo de la Unión Soviética ante la Alemania Nazi.
De acuerdo con lo indicado en reportes, para el desfile militar, Putin prepara un despliegue aéreo y terrestre en el que participarán varios de los vehículos más avanzados de Rusia.
En desfile militar se desplegará el avión de mando “del día del juicio final” Il-80
Debido a ello, se ha considerado que el desfile militar del próximo lunes 9 de mayo, se tratará de una advertencia de Putin sobre el “día del juicio final”, con dedicatoria a Estados Unidos.
Sobre los vehículos que Putin exhibirá en su demostración de armamento, se indica que participarán los siguientes:
- Aviones cazas supersónicos
- Bombarderos estratégicos Tu-160
- El avión de mando “del día del juicio final” Il-80
Cabe destacar que dicho avión, que no se usaba desde 2010, se trata de la aeronave que transportaría a los altos mandos de Rusia en caso de guerra nuclear.
En dicho escenario, el Il-80 puede convertirse en un centro de mando itinerante para transportar a Putin, pues está repleto de tecnología, aunque sus detalles específicos son secretos de estado.
Así lo ha dado a conocer el Ministerio de Defensa del gobierno encabezado por Vladimir Putin, de cara la realización del desfile militar.
Despliegue armamentístico de Rusia se dará en medio de cuestionamientos por guerra con Ucrania
Analistas internacionales refieren que el despliegue que exhibirá Putin en su desfile militar, se prepara debido a las debilidades de las fuerzas armadas rusas que han ocurrido en la guerra con Ucrania.
Lo anterior debido a que el gobierno de Putin que ha sido fuertemente sancionado por Estados Unidos y Occidente, no ha logrado obtener una victoria en el conflicto que lleva ya 72 días.
De la misma forma, las sanciones que Estados Unidos y Occidente han impuesto, colocan a la economía de Rusia en su peor punto de contracción desde los años posteriores a la caída de la Unión Soviética.