Un deslave de tierra dejó más de 670 muertos tras registrarse un fuerte terremoto en Papúa Nueva Guinea, en Oceanía.
El alud de tierra afectó a una aldea entera, ubicada al norte del país, la cual era hogar de varios grupos de mineros que trabajan en la zona.
Se trato de un sismo de magnitud 5.1, con epicentro a 150 kilómetros de Kavieng, en Papúa Nueva Guinea, que ocurrió durante la madrugada del viernes 24 de mayo 2024.
Deslave de tierra deja más de 670 muertos tras fuerte terremoto en Papúa Nueva Guinea
De acuerdo con Serhan Aktoprak, encargado de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para asuntos migratorios en Papúa Nueva Guinea, un deslave de tierra ha dejado hasta el momento un saldo de más de 670 muertos tras el terremoto del viernes.
Precisó que el deslizamiento de tierra, lodo y árboles, habría sepultado por lo menos 150 casas de la aldea Yambali, situada en una zona de laderas en la provincia de Enga.
Debido a que el fuerte sismo ocurrió durante la madrugada, generando el alud de tierra, tomó por sorpresa a las familias mientras dormían, por lo que no lograron salir de sus viviendas.
Esto provocó fuertes movilizaciones de equipos de emergencia, quienes han logrado evacuar a más de mil personas a sitios seguros.
Serhan Aktoprak señaló que el área se encuentra en estado de emergencia, debido a las constantes réplicas que se han presentado desde el viernes, sumado a las torrenciales lluvias que han azotado la región, provocan que la tierra continúe moviéndose.
Papúa Nueva Guinea busca sobrevivientes por deslave que sepultó una aldea
Serhan Aktoprak señaló que los servicios de emergencia en Papúa Nueva Guinea esperan utilizar maquinaria para buscar sobrevivientes tras el deslave, pues las lluvias han complicado las labores de rescate.
Y es que los locales han trabajado únicamente con palas, palos y herramientas caseras, ayudando a la remoción del lodo y árboles que permita limpiar los caminos.
De acuerdo con algunas revisiones que se han llevado a cabo, existen zonas de Yambali que quedaron sepultadas a más de 8 metros de profundidad entre rocas, raíces y lodo.
Además, miles de animales de ganado también murieron por el deslave, por lo que hasta el momento las autoridades no han realizado un recuento de los daños que dejó el terremoto de 5.1.