Oficialmente este domingo 10 de diciembre, Javier Milei recibe la banda presidencial de Alberto Fernández para convertirse en el presidente de Argentina, pero Cristina Fernández de Kirchner hizo una polémica grosería a los asistentes.

Cristina Fernández de Kirchner, previo a la entrega de la bandera presidencial al ingresar al Palacio Legislativo albiceleste vivió un momento incomodo con los argentinos que acudieron a la entrega del poder a Javier Milei.

Javier Milei llega a Argentina en medio de una crisis económica de la que prometió acabar, y con su método de la dolarización mejorar esta situación, lo que animó a los argentinos a votar por él, pese a sus polémicas declaraciones sobre temas progresistas.

Cristina Fernández de Kirchner levantó el dedo de en medio ante los argentinos polémica grosería que sorprendió al mundo

En su arribo al Palacio Legislativo de Argentina, a espaldas de la avenida Entre Río, Cristina Fernández de Kirchner acompañada de Máximo Kirchner y su equipo de seguridad caminaba hacia la entrega de la presidencia a Javier Milei.

Pero en un momento de cordialidad y hostilidad en un ambiente de contrastes en este inicio de gobierno de Javier Milei, Cristina Fernández de Kirchner saludaba a los argentinos que acudieron a este evento.

El saludo duró pocos segundos, ya que algunos de los asistentes le gritaron “prisión” en repetidas ocasiones, lo que causó una notable molestia a Cristina Fernández de Kirchner que estaba ataviada de un vestido rojo.

Como reacción ante estas ofensas, Cristina Fernández de Kirchner con su mano derecha en alto y de espaldas levantó el dedo de en medio la polémica grosería fue captada por las cámaras de televisión que transmitían el evento en vivo y ahora gira en todo el mundo por el internet.

Cabizbaja e incomoda Cristina Fernández de Kirchner entrega la bandera presidencial a Javier Milei

Luego de pasar este momento polémico ante millones de argentinos, Cristina Fernández de Kirchner estaba en la ceremonia de la entrega de la banda presidencial de Alberto Fernández a Javier Milei.

Pero durante esta entrega el notable lenguaje corporal de Cristina Fernández de Kirchner la delataba primero cabizbaja, además de gestos y expresiones que daban a notar su incomodidad.

Aunque trataba de sonreír ante las cámaras su incomodidad era considerable.