México.- Padres de familia del Colegio Montessori Matatena, lugar que es investigado por agresiones sexuales en contra de alumnos, han señalaron que tales agresiones no son recientes, sino se trata de un patrón recurrente en el caso de abuso sexual. 

Uno de los padres señaló que desde el pasado 24 de noviembre, sacó a su niña del colegio debido a que mostraba un comportamiento atípico, estaba con ira y enojada, algo que no había pasado.

En entrevista radiofónica con Grupo Fórmula, el padre de la menor, dijo haber presenciado cómo la directora de la escuela, Patricia Guitián Galán, le gritaba a la menor, de inmediato le reclamó que la niña entiende con instrucciones sin que les estén gritando.

Ante ellos presentaron una queja ante la Secretaría de Educación Pública (SEP) el 8 de diciembre, de 2015, pero desde esa fecha no lo han contactado.

En la queja piden el cambio de profesores ya que quienes conviven con los niños no tienen información de su formación, ni preparación, además señalan que el esposo de la directora, identificado como Rafael Leopoldo Duarte Pereda convivía con los niños sin ser del personal docente.

Cabe señalar que Duarte Pereda es señalado por parte de los niños como el hombre de quien recibían agresiones sexuales. 

Sara, otra de las madres de familia, indicó que su hijo comenta que que el sujeto “jugaba al doctor”, “Rafa me pega en la cabeza con un palo”. Agrega que los niños han hecho dibujos en los primeros peritajes que se hicieron en la Fiscalía, en los cuales hubieron irregularidades.

Ante ello, los niños están realizando de nuevo otro peritaje con lo cual están siendo revictimizados ya que están pasando por u nuevo proceso.

Sara dijo que el abuelo de otro de niño que estuvo en esa escuela hace 10 años y se acercó a ellos para comentarles que, en algún momento, el niño había sido víctima de abuso "porque presenta conductas de agresividad, problemas en el lenguaje, es bastante violento, tiene obsesiones”.

Además reveló que los niños refieren a Rafael Duarte como una computadora, los equipos de cómputo ya están en la PGJ para ver si hay pruebas de pornografía infantil.

Con información de Grupo Fórmula