A causa de la pandemia y por segundo año consecutivo, la 178 Representación de La Pasión de Cristo en la alcaldía Iztapalapa, Ciudad de México (CDMX) se llevará a cabo a puerta cerrada, con pocos participantes y será transmitido en línea.
Para la 178 Representación de La Pasión de Cristo no hubo ninguna convocatoria, inscripción, ni proceso de selección para los personajes. Toda la gestión se llevó a cabo en línea con cerca de más de 220 horas, informó el Comité Organizador de Semana Santa en Iztapalapa, CDMX.
La alcaldesa de Iztapalapa, Clara Marina Brugada, señaló que está realizando gestiones para que La Pasión de Cristo sea transmitida en la televisión pública y en el canal de la CDMX, por la pandemia de coronavirus.
Actores de La Pasión de Cristo realizaron ensayos virtuales
El Comité Organizador de Semana Santa en Iztapalapa (Cossiac) decidió que para la representación de La Pasión de Cristo este 2021, los actores del año pasado repetirán sus personajes y los vestuarios serán los mismos. Sólo Mauricio Luna, quien interpretó a Jesús de Nazareth, no participará en esta ocasión.
Los organizadores de la Semana Santa en Iztapalapa eligieron a Rodrigo Neri para representar a Jesús de Nazareth este 2021. El joven tiene 20 años, es nativo del Barrio de la Asunción y cursa la licenciatura de Química Farmacéutica en el Instituto Politécnico Nacional (IPN).
Rodrigo Neri aseguró que los ensayos para la Representación de La Pasión de Cristo fueron virtuales y el 14 de marzo comenzaron con las escenificaciones, para ello, los actores se tuvieron que realizar una prueba Covid-19 y mostrar su prueba negativa, de acuerdo con Milenio.
¿Cuál es el origen de La Pasión de Cristo en Iztapalapa?
A pesar de que la representación de La Pasión de Cristo se llevará a cabo de manera virtual, Rodrigo Neri se siente afortunado de representar a Jesús de Nazareth e incluso afortunado de vivir una pandemia, porque recordó el origen de la celebración en Iztapalapa.
En 1883, la CDMX tuvo una epidemia de cólera, una enfermedad bacteriana que provoca diarrea y deshidratación. Ante ello, los pobladores de Iztapalapa acudieron al santuario del Señor de la Cuevita para pedirle que terminará con la enfermedad “hizo el milagro de frenar una pandemia de cólera en este territorio”, dijo Rodrigo Neri a Milenio.